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SAN JOSÉ, California (AP) — Megan Rapinoe y Trinity Rodman se quedaron una al lado de la otra en lo más alto de una escalera esperando regresar al campo para recibir unos aplausos y fanfarrias antes de que la selección femenina de fútbol de Estados Unidos partiera hacia la Copa del Mundo.
La vieja y la nueva guardia de la selección estadounidense se está mezclando y está encajando. Estas mujeres todavía están aprendiendo unas de otras y sobre las demás. Y el entrenador Vlatko Andonovski confía en que los problemas se resolverán en las siguientes semanas de entrenamiento para que las estadounidenses brillen.
La estrella emergente Rodman marcó en el minuto 76 y nuevamente en el 88, y las estadounidenses finalmente capitalizaron las muchas opciones de ataque que generan para vencer 2-0 a Gales el domingo, en su último partido de preparación para la Copa del Mundo femenina.
Varias jugadoras están lidiando con lesiones, así que Andonovski tuvo que hacer ajustes en la alineación.
“Cambios eran necesarios y con ellos ahora vamos a necesitar tal vez un par de semanas más antes de entrar en sincronía”, dijo Andonovski. “Estamos muy seguros de dónde estamos ahora y podemos ver lo bien que probablemente nos veremos y cuando eso suceda, se verá bien”.
Primero, Rodman rompió el empate a ceros cuando tocó de primera un pase de Sophia Smith y luego volvió a lanzar enfáticamente para dar una idea del movimiento juvenil de las estadounidenses que se presentará en Australia y Nueva Zelanda.
Estados Unidos comenzará la ronda del Grupo E jugando contra Vietnam el 22 de julio en Auckland, para seguir contra las finalistas de 2019 Holanda en su segundo partido el 26 de julio y cierra la ronda de grupos ante Portugal el 1 de agosto.
