VUELVE de nuevo el fantasma del descontento en Morena y sus consejeros no se aguantaron las ganas de volverse manumisos con su presidente nacional, Mario Delgado, quien entregó al Partido Verde las candidaturas a diputado federal de la entidad, salvo el Distrito 04, además de que el líder, pasándose por el arco del triunfo el proceso interno de Morena en San Luis Potosí y avisándoles a través de medios de comunicación que el postulado de ese partido sería mujer…
LA voz de Mario Delgado es, sin duda, la decisión de Andrés Manuel López Obrador que, entre más dice que no se mete en el proceso de Morena, más se mete, pero con todo y la idolatría que le tienen al mandatario, los consejeros han decidido que ellos se mandarán a sí mismos y que no permitirán que las narices del “pollito” se entrometan más en su instituto político…
LO que los consejeros están haciendo no está nada mal, porque es el mejor ejemplo de democracia en un partido. Hay que recordar que echaron abajo el acuerdo de Delgado con Ricardo Gallardo para que fueran en coalición Morena y Verde, pero no deja de haber un ambiente enrarecido en esta institución que se ha convertido en un remolino de pasiones, dando una mala imagen ante la opinión pública…
QUÉ paradójico, entre más democrático un partido, parece menos confiable. La rebelión del Consejo Político Estatal simplemente es porque no quieren que las diputaciones federales sean para el Verde y porque al feminizar la candidatura al gobierno, deja con muy pocas opciones a los morenistas, no porque no quieran que sean mujeres las que compitan, aunque sí se preguntan qué demonios va a pasar con los que andaban haciendo campañas internas como Juan Ramiro Robledo Ruiz, Leonel Serrato Sánchez y Primo Dothé Mata, ya que se les eliminó de tajo y de un solo plumazo.
