Redacción
[Huasteca Hoy]
CIUDAD VALLES. El presunto feminicida de Tamuín, no ha sido sentenciado porque todavía se están aportando pruebas, y debido a que lo consideran altamente peligroso, lo devolvieron al penal de alta seguridad de Gómez Palacio, Durango.
Son cuatro procedimientos penales por el delito de feminicidio u homicidio calificado que enfrenta Filiberto, quien ayer otra vez fue llevado a declarar ante el Juez Tercero de Primera Instancia.
Y fue la última audiencia que tuvo, pues saliendo de ahí, solo lo llevaron por sus pertenencias al Centro Penitenciario de Valles, y lo trasladaron nuevamente al penal de máxima seguridad de Gómez Palacio, Durango.
Filiberto volvió a declararse inocente ante el juez, y sostuvo el argumento de que confesó los crímenes bajo tortura, pero lo que no explica es cómo llevó a los agentes investigadores a los lugares exactos donde estaban los restos de las víctimas, y tampoco se han presentado pruebas que demuestren su inocencia.
Como ya se ha informado, el exmilitar y maestro de artes marciales, habría asesinado a cuatro menores de edad y una joven, entre 2010 y 2014, en el municipio de Tamuín.
Los cadáveres o restos de cuatro víctimas fueron encontrados tras las declaraciones que hizo Filiberto luego de su detención, y solo faltó localizar restos de su primer víctima, una menor de nombre María, cuyo caso podría quedar impune, pues no se ha obtenido ninguna prueba.
A la fecha, no existe una sentencia en contra del susodicho, y eso se debe a que sus defensores legales han pedido tiempo para entregar pruebas que demuestren su supuesta inocencia, y por parte de la Fiscalía también han presentado evidencias acerca de su presunta responsabilidad.
“Él incluso ya quiere la sentencia, pero hasta que sus defensores y los litigantes de la Fiscalía digan que ya no hay más pruebas por presentar, entonces podré emitirla”, refirió el juez Salvador Ruiz Martínez.
