EL colapso de una tubería de aguas negras que vertía su inmundicia al río es la principal motivación que necesitaba la Dirección de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento (DAPAS) para insistir al Congreso para que le facilite el 15 por ciento de aumento a la tarifa en Valles…
AYER, el activista político y miembro del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción, Jesús Sierra Acuña denunció, a través de un ciudadano de Valles que literalmente se estaba lanzando caca al río, porque un tubo de un metro de diámetro se había roto y sus aguas sucias estaban cayendo al afluente, cosa que ha sucedido durante décadas, a causa de los vertederos de los que viven en las márgenes, solamente que el tubo roto, causa más impacto mediático…
MANDARON llamar a don Bernardo Saldaña García, director de Ecología, quien, en efecto, se dio cuenta de que todo estaba mal y que tendría que hacer las reconvenciones y señalamientos procedentes para que se corrigiera esa anomalía, nomás que cuando le preguntaron si sancionaría a la DAPAS, porque obviamente el problema era de una tubería que es jurisdicción de la paramunicipal, carraspeó un poco, miró para arriba y dijo que no se puede estar fregando a los mismos, o sea, a personas que prestan sus servicios al Municipio. O sea que su visita a ver el tiradero de caca fue de una inutilidad asombrosa…
LUEGO viene lo bueno. La rotura de ese tubo, no es más que poesía para los oídos de Raymundo Cano Tinajero, director técnico de la paramunicipal y al director Edgardo González Ordaz, porque es una muestra de que es más que necesario que se le agreguen 10 puntos porcentuales más a lo que les aprobó el Congreso, que fue de 5 por ciento o, en palabras cristianas, de 3 pesos con 80 centavos…
NADIE sabe para quién trabaja. Aunque el activista político siempre ha sido un serio crítico de la DAPAS, con la acción de ayer, le dio una herramienta maravillosa para que se reconsidere subir la tarifa, porque la justificación que esgrimen en la DAPAS es que los drenajes están colapsándose desde hace años y años y no hay dinero que alcance para que se arregle el subsuelo vállense, que literalmente está anegado de caca.
SE debe tener un poquito de madre a la hora de la transa. No se puede ir por la vida inventando que se facilita dinero a personas de escasos recursos para clavarse la lana o para poner negocios lucrativos en otros estados y andar como si nada, o como si todo…
DESPUÉS del caso de Mariano Niño, que fingió haber ayudado a una mujer que tenía un hijo enfermo y que incluso se murió, ah, pero sin dejar de cobrar el supuesto apoyó para su beneficio, algo se rompió en este Congreso, porque hay cosas que por lo regular, ni los políticos más perversos se permitían, que era abusar de la confianza o abusar directamente de gente que no sólo tiene necesidad de ayuda, sino que aparte sufre de alguna condición delicada de salud…
HAY límites para todo. El Congreso actual no sólo es el más omiso y el más inane de la historia, no sólo es el más vulgar y el más naco; no sólo es el más ignorante y el más exasperante; no sólo es el más imbécil, a la hora de las propuestas, sino que es el que ha demostrado que la zafiedad no tiene límites y que la vergüenza es infinita, como el espacio sideral.
