EL caso en el que murieron un hombre y sus dos hijos vuelve a tener repercusión, porque reapareció la mujer que reclamó mediante una demanda por responsabilidades contra la Junta Estatal de Caminos (JEC) por la fractura de un puente que causó la peor tragedia que haya sufrido una familia en la delegación de La Hincada.
MARÍA de los Ángeles Cárdenas Ávalos es la madre y abuela de los que perdieron la vida el 22 de septiembre de 2013, en el puente de la delegación mencionada y quien describió cómo, a pesar de que se le advirtió a la autoridad de caminos, meses antes, que el paso que se desplomó, estaba fracturado y endeble, nadie hizo nada y uno de sus seis vástagos, Edgar Zamora, su nieta Daniela de 10 y también su nieto Edgar de cinco terminaron en una hondonada formada por las dos partes en las que se convirtió el tope del puente.
AUNQUE hace tres años comenzó las acciones legales para que haya responsables sobre el hecho, durante el primer año de duelo, nadie se comunicó con ella para ofrecerle ni siquiera una disculpa o explicación sobre el lamentable hecho. La mujer de casi sesenta años de edad espera que algo suceda, porque después de llorar a los suyos durante meses negros, se ha acostumbrado a esperar y esperar.
HABLANDO de puentes, el Cascabel, que tiene un año y casi dos meses de haberse colapsado, apenas está en una fase de prueba estructural, en su parte poniente, en donde hay un constante desafío sobre la resistencia de materiales, para colocar los pilotes adecuados que resistan el paso del tiempo en estas tierras de humedad y de inestabilidad.
LA cosa va para largo y no hay manera de culpar a nadie sobre esta falla que, quizá inició con la edificación que data de hace una década, de acuerdo con las autoridades fiscalizadoras de los tres niveles de Gobierno. Mientras tanto, la entrada poniente de la ciudad, que es la carretera que viene de Rioverde sobrevive con el parche que ya tiene y con el mal tiempo que ha atrasado, para acabarla de fregar, las obras de reconstrucción
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YA se saborearon los regidores de Valles su aguinaldo para este año que consistirá en la friolera de casi 150 mil pesos, tomando en cuenta que su sueldo es de actualmente 49 mil 800 pesos por mes y que les dan tres meses de beneficio de fin de año…
EN pocas palabras, tomando en cuenta el sueldo del mes, cada regidor se llevaría un total de 200 mil pesos a casa, sin descontar los impuestos, por supuesto, aunque con la certeza de que esta es la cantidad de la que gozarán, a pesar de que casi ninguno de ellos propone iniciativas ni tampoco se responsabiliza diligentemente de sus comisiones dentro de la comuna…
COSA curiosa: muchos vecinos se han convertido en delincuentes caninos para poder hacer negocio. Así es, de acuerdo con el director de la Policía Municipal de Valles, lo que está en boga entre los amantes de lo ajeno es robarse cachorros de raza Pug o Gran Danés, para después convertirlos en fábricas de otros cachorros que pueden comercializar a altos costos y salvando su propia economía…
ASÍ ha sucedido en muchas casas de Valles, donde los perros de raza, que no sólo son una inversión de la familia, sino motivo de su afecto, ahora son traficados para ser cruzados y sus cachorros comerciados en donde se pueda, ya sea en parques, plazas o redes sociales. Lo que sorprende es cómo se diversifica la delincuencia en estos días.
