Daniel Vázquez
[Huasteca Hoy]
CIUDAD VALLES. Por poco estalla la violencia en la colonia Buenos Aires, pues un grupo de personas quiere impedir que se habiten unos predios que incluso ya están escriturados.
Ayer por la mañana Guadalupe Silva, propietaria legal de un terreno que está ubicado en la calle Bronce, entre Trabajadores de la Construcción y Oriente Dos, envió a dos personas para que chapolearan su solar.
Pero alrededor de las 11:45 horas, llegaron varias personas entre los que se encontraban una mujer de nombre Patricia, y unos hombres a los que se les conoce como “Los Felipes”, todos seguidores de la ex lideresa de la colonia, Irma Cardozo Rodríguez, quienes con machete en mano les pidieron a los jornaleros que se fueran, porque ellos iban a tomar posesión.
Los trabajadores no discutieron por temor a que les hicieran daño, y se fueron, pero le llamaron por teléfono a la dueña del terreno y ésta a su vez pidió ayuda a la juez auxiliar del ejido Plan de Ayala, Beatriz Elena Treviño Pérez, quien salió de inmediato en compañía de otros ejidatarios para interceder por la mujer.
Como se recordará los ejidatarios de Plan de Ayala fueron dueños legalmente de los terrenos que conforman la colonia Buenos Aires, y vendieron varios de ellos, entre ellos el de Guadalupe, quien incluso ya cuenta con escrituras que la avalan como legítima propietaria.
El caso es que algunas personas, como las que llegaron a sacar a los jornaleros, quieren impedir que los predios ya escriturados sean habitados, pues pretenden invadirlos, “y eso no se va a permitir”, refirió la juez auxiliar, quien además de trasladarse al sitio de conflicto, hizo un reporte al Sistema de Emergencias 911.
Al poco tiempo de que los ejidatarios arribaron, y justo cuando empezaba la discusión con los seguidores de Irma, llegaron elementos de la Policía Municipal, y los supuestos instigadores desistieron y se retiraron voluntariamente, entonces los uniformados conminaron a la juez que trataran de resolver el problema por la vía legal, es decir, ante el Ministerio Público.
También arribó Guadalupe Silva, con escrituras en mano para demostrarle a los policías que ella era la dueña del terreno, y éstos le hicieron la misma recomendación, que interpusiera una denuncia ante la fiscalía.
Como aparentemente todo estaba en calma, los oficiales se retiraron, y en el lugar se quedaron los ejidatarios con la dueña del predio y su pareja. Pero al poco rato la gente que armó el escándalo volvió, y se metió a los terrenos de Guadalupe, Héctor Martínez, y otras dos personas.
De nuevo hubo agresiones verbales entre ellos, “Los Felipes” y sus compinches traían palos y machetes, con los que amenazaron a los ejidatarios y la dueña de uno de los terrenos, entonces hubo otro llamado al 911.
Esta vez arribaron decenas de policías municipales, quienes calmaron una vez más los ánimos, aunque un hombre que a decir de los ejidatarios, tiene parentesco con Irma Carozo, se puso a alegar con los policías pese a que no sabía qué era lo que estaba pasando, pues sólo comentó que acudió porque su esposa lo llamó y estaba ahí para defenderla.
Al final los dueños de los terrenos se retiraron pues dijeron que acudirían directamente al Ministerio Público para denunciar el despojo que sufrieron, y los supuestos agresores se quedaron en el lugar, aunque en la vía pública. Supuestamente los policías se quedarían vigilando de manera permanente.
