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CIUDAD DE MÉXICO. – Todavía hace veinte años Tongolele era capaz de mover las caderas como cuando era una joven bailarina que amenizaba los centros nocturnos. Su belleza exótica no solo conquistaba los corazones de los caballeros sino también despertaba la admiración de las damas que buscaban bailar, aunque fuera un poco, como ella.
Nacida en Washington el 3 de enero de 1932, Yolanda Yvvone Montes Farrington siempre tuvo problemas desde niña ya que las maestras la consideraban una mala influencia porque era simplemente hermosa, y según ellas, sexy para su edad.
Por ello decidió tomar las riendas de su destino e incursionó en el mundo de las bailarinas exóticas en cabarets como El Tívoli, cuando estas vedetes eran el corazón de los centros nocturnos de la primera mitad del siglo pasado.
Ataviada con un corpiño y un bikini adornado con lentejuela, Tongolele fue la fascinación desde sus primeras presentaciones y fue tal su éxito que pronto llegó a la pantalla grande y, aunque nunca fue protagonista en el cine de rumberas, siempre fue un referente indispensable en la vida nocturna de la Ciudad de México.
Actuó en la comedia “Pensión de artistas” (1956) junto a Lola Beltrán, María Victoria, Pedro Vargas, Óscar Pulido y Sonia Furió. Esta cinta es una muestra de cómo los actores de carpas y teatros hacían giras por todo el país, mientras vivían aventuras, hacían amigos y tenían romances.
Esta no fue la única cinta donde tuvo un papel, protagonizó “Han matado a Tongolele” (1948) junto a David Silva y Lilia Prado, además de otras producciones como “Las mujeres panteras”, “Nocturno de amor”, “Mátenme porque me muero”, “El rey del barrio”, “Chucho el remendado” y “Amor de locura”, entre otras.
