Viernes 10 de Mayo de 2024

Sefardíes, grupo por el que Salinas obtuvo la nacionalidad española

Sun

CIUDAD DE MÉXICO, octubre 30 (EL UNIVERSAL).- Carlos Salinas de Gortari, expresidente de México, obtuvo la nacionalidad española a comienzos de 2021, luego de haberla solicitado mediante el procedimiento para sefardíes o sus descendientes, de acuerdo con el diario El País.

Por lo anterior, han surgido dudas en torno a quiénes pertenecen a este grupo, el cual, a pesar de habitar en puntos diversos de todo el mundo, se mantiene ligado a la cultura hispánica a través de su lengua y sus tradiciones.

¿Quiénes son los sefardíes? Se llama sefardíes a los judíos oriundos de España, o bien a aquellos que sin proceder de dicho país aceptan las prácticas religiosas de los judíos españoles, según indica el diccionario de la Real Academia Española.

De hecho, la palabra ‘sefardí’ se deriva de un topónimo hebreo, que tradicionalmente se identifica con la península ibérica, es decir, se refiere a los territorios de España y Portugal.

Fueron expulsados del reino de España en 1492, cuando Fernando e Isabel ordenaron a todos los judíos que se convirtieran al cristianismo o que salieran de su territorio; varios de ellos continuaron practicando su religión en secreto, mientras que otros se dispersaron por Europa, África del Norte, Arabia y el hemisferio occidental.

Eventualmente llegarían a todo el globo, pero sin desligarse de la cultura ibérica. Es por esto que, desde 2015, los descendientes de los sefardíes expulsados pueden recuperar la ciudadanía española si acreditan su origen.

¿Qué lengua hablan los sefardíes? Según explica el portal de la BBC, una forma de acreditar la descendencia de los judíos que fueron expulsados en el siglo XV es hablar o escribir su lengua, es decir, el ladino o judeoespañol.

Esta lengua se caracteriza por su arcaísmo, ya que, al haberse desvinculado del castellano peninsular y emplearse sólo en el círculo familiar, ha experimentado pocos cambios a través de las generaciones.

Sin embargo, el ladino no se considera derivado directamente del latín, sino que es producto de la evolución del español fuera de las fronteras de la península ibérica. Además, debido a esto cuenta con diversos dialectos.