Martes 21 de Mayo de 2024

Madre de hija atacada por un perro pide justicia

Redacción

Huasteca Hoy 

CIUDAD VALLES. El caso del asesinato de un perro en Ciudad Valles, podría dar un vuelco inesperado, pues una mujer asegura que los inculpados son inocentes, y ha denunciado a la propietaria del extinto can.

Hace un par de semanas, Juanita Santiago Zúñiga, se manifestó frente al Centro de Justicia Integral de Ciudad Valles, y expresó públicamente que el asesinato de su mascota, un perro llamado Topi, seguía impune, pues los autores están libres, y no han pagado nada. En febrero de 2021 el can fue golpeado hasta la muerte, y se señaló como responsables a Sebastián y Yovani, vecinos de dicha mujer. 

María Guadalupe Banda Rocha, es expareja sentimental de Sebastián y madre de Yovani.

“El día y a la hora que dicen que encontraron muerto a Topi, mi hijo Yovani andaba conmigo, y Sebastián estaba trabajando, tengo pruebas de ello”, refirió María Guadalupe.

Pidió que no se siga dañando a su familia, “no es posible que pongan más atención a un animal, que a un ser humano, la vida de mi hija estuvo en peligro ese día, y nadie se fijó en eso”.

Dayana se llama la hija de María Guadalupe, el día de los hechos tenía 4 años de edad, y había ido a jugar con los hijos de Juanita.

“Yo soy comerciante, me voy a los campos deportivos a vender tamales, no tengo muchos recursos, pero con lo que podía, ayudaba a Juanita, teníamos una buena relación, por eso nuestros hijos jugaban en su casa o en la mía”. 

“Ese día yo llegué del trabajo y encontré a mi niña sangrando de la cara, la había mordido el perro (Topi) de Juanita, por eso rápido la cargué y la llevé al médico, más tarde regresamos a la casa y me enteré que habían matado a Topi, pero mi hijo no fue, porque él me acompañó a llevar a la niña con el doctor, y mi ex pareja estaba en su trabajo”.

Ese mismo día María Guadalupe interpuso una denuncia en contra de Juanita, porque fue su perro quien atacó a Dayana, y le ocasionó heridas en la nariz, así como en una mejilla y el mentón.

Esas heridas le dejaron cicatrices permanentes, pero también daño psicológico, pues la niña tiene sobresaltos, y cambió su estado de ánimo. 

“Hasta ahora nadie me ha ayudado, gasté en las curaciones de mi hija, en los traslados, y sigo exigiendo a las autoridades que me apoyen con la atención de un psicólogo, y que obliguen a Juanita a reparar el daño”, finalizó la mujer, quien ayer acudió a la Séptima Delegación de la Fiscalía General, para pedir la intervención directa del delegado Francisco Montiel Villeda.