Sábado 27 de Abril de 2024

A un año y seis meses del asesinato de un perro en Ciudad Valles, la dueña sigue clamando justicia

Redacción Huasteca Hoy  CIUDAD VALLES. El crimen del perrito “Topi” sigue impune, pues los asesinos no han pagado, sólo tienen algunas restricciones. Juanita Santiago Zúñiga, vecina del fraccionamiento El Consuelo, acudió la mañana de ese lunes al Centro de Justicia Integral, donde se llevó a cabo una audiencia, por el caso del asesinato de su […]

Redacción

Huasteca Hoy 

CIUDAD VALLES. El crimen del perrito “Topi” sigue impune, pues los asesinos no han pagado, sólo tienen algunas restricciones.

Juanita Santiago Zúñiga, vecina del fraccionamiento El Consuelo, acudió la mañana de ese lunes al Centro de Justicia Integral, donde se llevó a cabo una audiencia, por el caso del asesinato de su mascota que en vida llevó el nombre de “Topi, crimen que data de marzo de 2021.

Son dos hombres quienes a golpes le quitaron la vida al can, uno de ellos se llama Sebastián de 43 años de edad, y el otro Yovani de 23 años, ambos vecinos de la mujer, quienes están en libertad, y aunque se les vinculó a proceso por el probable delito de maltrato animal, hasta el momento no han recibido un castigo.

“Hoy se les dio un ultimátum, y en seis meses más tardar tienen que cumplir con la reparación del daño, me parece que son como 48 mil (pesos)”, expresó Juanita, en una entrevista que ofreció a este medio de comunicación, al salir de la audiencia.

Refirió que con eso no pagan todo el daño que hicieron, pues su hijo que actualmente tiene 12 años, quedó con daño psicológico, incluso perdió un año en la escuela.

Y es que el menor presenció, cuando los dos hombres sacaron de su casa a “Tipo”, amarrado, y luego lo golpearon con unos bates de béisbol hasta matarlo.

Eso lo hicieron porque el can mordió a una menor, hija de Sebastián, pero Juanita asegura que su perro lo hizo en reacción a las agresiones que estaba sufriendo por parte de la menor, quien lo habría golpeado en varias ocasiones.

La ofendida añadió que ha gastado mucho más, en el traslado constante ante el Ministerio Público y luego al Centro de Justicia Integral para estar al pendiente del caso, además de las horas que ha faltado en su trabajo, donde afortunadamente me dieron oportunidad de ausentarse el tiempo que necesitara. 

Ahora a la mujer solo le resta esperar a que llegue el castigo para los dos hombres, aunque sabe de antemano, que no van a pisar la cárcel, sólo le devolverán parte del dinero que ha gastado.

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