Cemex y organizaciones aliadas, unen esfuerzos para crear un manual qué permite evaluar calles seguras en México, para proteger la vida de los ciclistas y disminuir los riesgos de accidentes.
El manual obedece a que en la estadística, uno de cada cinco hogares en el país tiene una bicicleta como medio de transporte
La estadística se basa en los datos que aporta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en la que establece que el 21.2% de los hogares de México cuentan con una bicicleta, porcentaje que se incrementa a 39.4% en Yucatán, 36.7% en Guanajuato o 31.8% en Tlaxcala. En el caso del Estado de Nuevo León, se encuentra por debajo de la media nacional con 11.5%.
El reporte estadístico, estima que en la Ciudad de México hay 14000000 de personas que utilizan bicicleta, y aprovechan ventajas tales como la disminución de tiempo de traslado, la reducción del tráfico vehicular y las cero emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.
En el proceso de creación del manual bajo el auspicio de CEMEX, se involucra la organización civil Mapasin, organización sinaloense con sede en Culiacán, que realiza actividades a favor de la movilidad. En el proceso se involucró también Estrategia Misión Cero (EMC), de CEMEX, programa que se concentra en acciones de seguridad vial.
Con el manual, los usuarios tienen acceso a información para evaluar qué calles son seguras para los ciclistas, y contribuye al resguardo de la integridad de los que pedalean como parte de su vida diaria de transporte, de recreación o deporte. La evaluación ayuda a evitar lesiones y muertes en los ciclistas.
Además de la seguridad, el programa considera un motivo de reflexión y concientización del ciclismo como sistema de movilidad urgente, ante la crisis del medio ambiente y el clima, que obliga a una serie de políticas que rediseñen en los espacios públicos y los hagan amigables para las bicicletas.
Además, con el proyecto hay un impacto a la salud, puesto que permite el incremento de la actividad física además ayuda a bajar los riesgos de muerte por siniestros viales, puesto que los espacios para ciclistas se convierten en gestores naturales de la velocidad de los vehículos en la ciudad.
En el proyecto se involucraron colectivos, organizaciones civiles, académicos y colaboradores además de la organización civil y el programa de CEMEX. Juntos crearon la metodología con enfoque en la seguridad de los ciclistas y las ciclovías en el espacio público, basados en indicadores de infraestructura, tanto la que se encuentra en funcionamiento como la que hace falta.
El estudio incluye obstáculos, exceso de velocidad y diversos riesgos al convivir con vehículos motorizados.
El plan enfoca su estudio en ciudades mexicanas qué cuentan con ciclovías tales como la Ciudad de México, Guadalajara, San Luis Potosí, Culiacán, Chihuahua, Pachuca y Mérida.
Las organizaciones civiles recomendaron.
