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La segunda temporada de la comedia “Ana” promete más enredos y complicaciones románticas que la primera, además de que la protagonista sufre por tener lo que tanto deseaba: más fama y trabajo como actriz.
Tras estar peligrosamente cerca de la ruina, Ana tiene ahora un papel protagónico en una serie popular llamada “Los Adame”, basada en, o más bien copiada de, “Los Locos Adams”. Pero en vez de ser la Morticia que anhelaba, Ana interpreta a Mortadela por una trampa de Check (Andrés Almeida), al que desairó dejándolo como “solo amigos” con derechos.
“Es esta cosa de lo que se trata la serie que es ‘cuidado con lo que deseas'”, dijo Ana de la Reguera, creadora, guionista, estrella y productora ejecutiva de “Ana”, en una entrevista por videollamada. “Ella piensa que finalmente todos sus sueños se van a cumplir… y resulta que no era lo que ella esperaba”.
La nueva temporada de “Ana”, que se estrena el viernes en Estados Unidos y Puerto Rico por Pantaya y en más de 240 países por Amazon Prime Video, comienza con un capítulo deslumbrante, escrito por De la Reguera, que se desarrolla en una glamurosa premiación de televisión en la que Ana y el elenco de “Los Adame” compiten con Aracely Arámbula y Carmen Salinas, en uno de los últimos papeles de la fallecida primera actriz mexicana, quien por cierto habla mal de Ana en el episodio.
“Fue muy especial para mí porque muchos compañeros y amigos le entraron al juego, entraron a jugar en esta ficción, de cierta manera también burlarse de sí mismos, como yo me burlo de mí misma”, dijo De la Reguera sobre la participación especial de estas actrices.
Contó que conoce a Arámbula desde que estudiaban actuación en el Centro de Educación Artística de Televisa, de donde han egresado muchos actores famosos: “Estudiamos en el mismo salón”, dijo.
Las envidias contra Ana no sólo están fuera del set; en “Los Adame”, existe una rivalidad entre ella y su coestelar Martes, interpretada por la actriz argentina Antonia Robolini, una niña a la que trata de sabotear y desenmascarar, pues Ana está convencida de que su madre no está muerta como dice.
“Una niña de 8 años es su mayor rival”, dijo De la Reguera. “De por sí mi personaje es como una adolescente tardía, también por eso era necesario que mi (co) protagonista fuera una niña porque es casi, casi, la madurez mental que tiene Ana en ciertos momentos y ciertas cosas, y eso lo hace también muy divertido”.
Ana se mete en un embrollo laboral tras un desplante que le lleva a destruir un set y, por más que trata de dejar “Los Adame”, está atada por contrato a la producción y a su personaje.
