Rubén Pacheco
Huasteca Hoy
A causa de inadecuada atención médica y violencia obstétrica, en el 2020 un bebé recién nacido, hijo de una mujer indígena con discapacidad, falleció en el Hospital Básico Comunitario de Aquismón, reveló una investigación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
Derivado de ello, el organismo autónomo emitió la Recomendación No.03/2022 a Daniel Acosta Díaz de León, director general de los Servicios de Salud del Estado.
De acuerdo con el expediente 2VQU-0042/2020, la madre acudió al nosocomio el 1 de febrero de 2020 cuando cursaba un embarazo de 38 semanas de gestación con fecha probable de parto el 14 de febrero de ese año, dado que presentaba dolor de garganta.
Una vez en el hospital, el personal médico también le detectó presión arterial alta, por lo que al ser dada de alta decidió permanecer en el refugio “Posada AME”, ubicado frente al complejo hospitalario.
Sin embargo, regreso el 8 de agosto pues presentaba dolores de parto, por lo que
fue ingresada a las 17:00 horas y le avisaron que la trasladarían al Hospital General de Ciudad Valles, donde el bebé murió al día siguiente.
El certificado de defunción No. 200633831, expedido por la Secretaría de
Salud, asentó que falleció el 9 de febrero
de 2020, a causa de asfixia perinatal severa, síndrome de dificultad respiratoria y encefalopatía hipóxico-isquémica.
Al solicitar una opinión técnica, un perito del Colegio de la Profesión Médica del Estado concluyó que las acciones y prácticas médicas no se efectuaron en forma adecuada, no fueron oportunas, no fueron completas y no fueron eficaces.
Ello, porque con los antecedentes de la madre, no se realizó diagnóstico de
Desproporción Cefalopélvica y se dejó que progresará trabajo de parto por 11 horas.
