Jueves 16 de Mayo de 2024

“Doctor Strange 2” es rara, aterradora y complicada

AP

Una vez que una franquicia de superhéroes entra al multiverso, es difícil salir de él.

Ninguna obra de ficción necesita permiso para romper las reglas o traspasar los límites de la narración convencional, pero el multiverso, al menos como se presenta en las últimas películas de Marvel, prácticamente lo exige. Y por el momento eso significa más oportunidades de cameos. “Spider-Man: No Way Home” (Spider-Man: Sin camino a casa”) abrió la puerta al concepto con resultados en su mayoría favorables, pero ahora el maestro de las artes místicas interpretado por Benedict Cumberbatch vuela por el portal interdimensional con este concepto en “Doctor Strange in the Multiverse of Madness” (“Doctor Strange en el multiverso de la locura”).

La película es técnicamente la secuela de “Doctor Strange” de 2016. Pero han pasado tantas cosas en el universo de Marvel que involucran a Stephen Strange y su barba — “Avengers: Infinity War”, “Avengers: Endgame” y, sí, la más reciente entrega de “Spider-Man” — que “Doctor Strange” está completamente fuera de lugar en cuanto a continuidad. Uno no puede ver “Doctor Strange” y luego “Doctor Strange 2” y esperar que tenga sentido.

No sólo eso. Para comprender “Doctor Strange 2” también requiere tener un conocimiento superficial de “WandaVision”, la serie de nueve episodios de Disney+ que dura casi seis horas en total. Esto no es una sorpresa o una carga para los fanáticos de Marvel, pero sí parece ser mucho que pedir para el cinéfilo promedio (aunque quizás a este punto ya son lo mismo).

Por lo tanto, es especialmente interesante que Sam Raimi aceptara ingresar a este desordenado multiverso corporativo en este punto. Después de todo, sus películas de “Spider-Man” todavía se encuentran entre las mejores de las franquicias modernas de superhéroes. Raimi ha logrado imprimir su propio sello en este esfuerzo, incluyendo, entre otros, un cameo de Bruce Campbell. También hay elementos de terror, algunos tan intensos que las familias podrían pensárselo dos veces antes de ir todos al cine; algunas imágenes interesantes no muy diferentes a la ciudad de “Inception” y algo de humor. Pero Raimi no lleva a “Doctor Strange” a un tono totalmente diferente, como lo hizo, por ejemplo, Taika Waititi con Thor. En general, se apega al marco establecido por Scott Derrickson.