Miguel Barragán
CIUDAD VALLES.- El expresidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de la Huasteca, Carlos Gerardo Solares Sánchez dijo que la cascada de Tamul no es víctima de extracciones irregulares de cañeros, sino que tiene ciclos en los que se seca, desde siempre, nada más que antes ese fenómeno no era noticia, se volvió tema cuando comenzó a explotarse el turismo.
La cascada de Tamul tiene sus mejores épocas de noviembre a enero, cada año, porque están recargadas las cuencas, pero en esta época del año el estiaje de casi seis meses afecta el comportamiento de las caídas de agua.
Refirió que el hecho de que los cañeros dejen de extraer agua durante casi todo abril para dar oportunidad a que el río Gallinas se reponga y que vuelva la cascada a aparecer, con menos cortina que al finalizar el año, pero al menos con suficiente vista para turistas nacionales y extranjeros.
Recomendó no satanizar a los cañeros, porque 70 centavos de cada peso provienen del dinero que generan.
