Jueves 09 de Mayo de 2024

Denuncian a polis estatales torturadores

Redacción

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CIUDAD VALLES. Ignacio González Batres fue a la oficina de Derechos Humanos de la colonia Mirador a denunciar que el sábado pasado un grupo de policías estatales entraron a su casa, la destruyeron, se lo llevaron a un baldío y lo torturaron para sacarle información sobre dinero y droga de la que él nunca ha oído hablar.

El joven de 30 años de edad estaba viendo videos en Facebook con su esposa de 25 años y su hija de cuatro, cuando tocaron a la puerta y luego de que abrió, entraron con violencia al menos una docena de policías que le apuntaban y que revolvían las cosas y rompían los cojines de la sala, como buscando un botín.

A su esposa la sacaron de la casa y aunque la interrogaron, no la lastimaron físicamente.

Luego del allanamiento a su domicilio, González Batres fue trepado a una camioneta y en un solar baldío le preguntaban insistentemente por drogas y dinero.

El interpelado no podía decir nada de lo que asegura que no sabe y eso valió para que comenzara la tortura física.

 

Métodos de horror

Lo que más mortifica a Ignacio González es que uno de los métodos de tortura utilizados fue pincharle el hombro izquierdo con una aguja de jeringa de la que no sabe su procedencia o si es usada.

Le arponearon al menos 10 veces mientras lo interpelaban.

Luego pasaron a los choques eléctricos con la chicharra: pasaron de su costillar a sus genitales y por último, un agente lo tumbó al suelo, le puso la bota en el cuello y quijada y le empezó a tallar la cara con una lija para despintar metales, amenazándolo con “borrarle la cara si no hablaba”. Luego de un rato, lo encapucharon y fueron a casa de su patrón, Rubén Salazar, a hacer prácticamente lo mismo que le habían hecho a él, mientras escuchaba la ejecución del mismo modo de operar que habían empleado los policías contra él.

Luego de hora y media de tortura, González Batres fue abandonado en el campo municipal de Tanquián.

 

Las denuncias

Hoy, tanto Ignacio González como su empleador estuvieron en la Fiscalía General del Estado y en la Segunda Visitaduría de Derechos Humanos denunciando estos hechos, porque incluso a este último lo exhibieron con marihuana y con droga de tipo cristal en boletines que se enviaron a medios de comunicación.

“Mucha gente en Tanquián ha sido víctima de estos señores que quitan motos, interrogan, golpean a todo mundo y la gente tiene miedo, por eso nadie ha denunciado nada”, concluyó.