Miguel Barragán
CIUDAD VALLES.- Parientes de pacientes que requieren del servicios de hemodiálisis en el ISSSTE protestaron desde temprana hora porque el módulo dedicado a ese tratamiento informó tarde que no servía la máquina para limpiar las toxinas de los enfermos, por lo que se inconformaron, ya que requerían del servicio.
La manifestación sirvió, porque en cinco horas estaba funcionando de nuevo la máquina.
Hace tres meses, el dispositivo para atención de enfermos renales, diabéticos e hipertensos, que se convierte en la salvación de vida de quienes lo usan también falló, aunque aquella vez la descompostura tardó más en subsanarse, afectando la vida de los pacientes que dependen de ese tratamiento para seguir con vida.
Hoy, Daris Austria Morelos, quien lleva a su esposo de 54 años a dializar y Benita Arenas que va con su madre, la beneficiaria del tratamiento de 72 años, se inconformaron y exigieron al ISSSTE y al mismo Sindicato magisterial que no dejen caer ese servicio, porque es igual a dejar sin vida a sus parientes y que esto no debe repetirse.
