Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
CIUDAD VALLES.- Trabajadores sindicalizados de la DAPAS, encabezados por Alejandro Ballesteros Corona acudieron a partir de las siete de la mañana a las puertas de las instalaciones de la paramunicipal con el fin de ocupar sus puestos laborales, sin embargo, las puertas de entrada de personal no fueron abiertas por los guardias y aunque solicitaron audiencia, no fueron recibidos por nadie.
Ballesteros Corona continúa con el argumento de que el Juzgado Quinto de Distrito le otorgó a su gremio una suspensión definitiva sobre el acuerdo del 2 de octubre de 2019, el 10 de ese mismo mes y año, en la que dice que los trabajadores pueden regresar a su lugar de trabajo en el momento que lo deseen.
Ayer, el apoderado legal de DAPAS, Edgar Enrique Sánchez González dijo que, ante el acuerdo del 2 de octubre de 2019 de terminación de huelga, pedida por una mayoría disidente del movimiento de Ballesteros Corona, el plazo para presentarse a trabajar de los paristas (79 de los 210 trabajadores) era a las seis de la tarde del 3 de octubre y, puesto que nadie se presentó a laborar, entonces se rescindió el contrato de esos mismos 79, “a los que no se les debe nada”.
Luego de estar una hora afuera de las instalaciones de la DAPAS, Ballesteros y compañía fueron a las afueras del edificio del Poder Judicial Federal, en el segundo y tercer piso de Abasolo 414, para cumplir con una cita con la magistrada del Juzgado Quinto de Distrito, porque es la autoridad donde se judicializó el pleito sobre la huelga y el conflicto entre DAPAS y los sindicalizados que tienen en paro desde el 31 de octubre de 2018.
