QUÉ curioso que el ex director de DAPAS y candidato de Sí por San Luis a la Presidencia de Valles, Marco Antonio Guillén Rivera haya tenido información privilegiada del Tribunal Colegiado del Noveno Circuito sobre el fin del proceso que certifica que los que se desistieron de la huelga tenían razón en salirse del movimiento y que eso, habría conjurado la misma huelga…
La comunicación de Guillén advierte que, tras su administración en la DAPAS, el resultado es uno y sólo uno: se le ganó al Sindicato de la DAPAS y nada se debe a los que siguieron con el paro y que son 88 personas, incluyendo a Alejandro Ballesteros. Eso es bueno, en campaña, claro…
PERO en realidad, la certeza legal de que la huelga ha terminado no es tal, sino que solamente se está dando la razón a los 122 que no aceptaron seguir en el paro y regresaron a trabajar, pero sigue vigente todo lo que tiene que ver con los derechos laborales de los trabajadores, como dice Ballesteros, aunque Edgar Enrique Sánchez González sostiene que Ballesteros y los suyos están fuera de la DAPAS, están despedidos y nadie les debe nada. Quizá la grilla le esté ganando a la política, porque en realidad, se ve muy difícil que una cosa llena de tantas aristas legales, se resuelva a un par de semanas de que sean las votaciones más peleadas de la historia…
POR el mismo camino, pero en el terreno de los dimes y diretes entre candidatos, está el asunto de las despensas que iban para Coyoles, que presumiblemente fueron denunciadas por ciudadanos muy probos que odiaron ver las dádivas en una camioneta y que le hablaron al representante legal de Marco Antonio Guillén, Edgar Enrique Sánchez González para que las fuera a perseguir junto con la Policía Municipal, suenan más bien a una vigilancia electoral extra llevada a cabo por Héctor Mar del Ángel, director de la corporación municipal y amigo personal del candidato Guillén…
DAVID Medina podrá tener despensas a su nombre y entregarlas a los prosélitos de él, mismo o del Pollo Gallardo, pero suena muy extraño que de todas las despensas y apoyos que se reparten en toda la ciudad, nada más agarren las de él, que es el más cercano contrincante de Guillén, pero bueno, son sólo suposiciones…
AHORA bien, Medina mismo ha dicho que le están inventando eso de las despensas porque sus adversarios (Guillén), le tienen miedo, ya que él hizo una encuesta en la que va 20 puntos arriba del segundo lugar, una cantidad de puntos porcentuales que literalmente no tuvo ni Obama, a menos de que la encuesta a la que se refiere la haya hecho en la sede del Partido Verde…
Y ya entrados en los catorrazos del último mes de elección, se debe recalcar que el candidato de Morena a la Presidencia municipal, Guadalupe Contreras Pérez anda muy tranquilo, engordando poquito de tanto gusto y repartiendo sonrisas como anfitrión de programa de concursos, sin que muchos acierten a saber porqué tan tranquilo, tan relajado…
RESULTA que el regidor con licencia y alcalde con licencia está operando su propia campaña con la premisa de que él es el candidato de Andrés Manuel López Obrador y eso, quieran o no, cala hondo en muchos sectores de la población (nada más el 42 por ciento de los vallenses es pobre, echen cuentas), además de que la popularidad del mismo presidente y la invitación a votar “4 de 4” le da un pase, todo pagado a Lupillo para irse por la libre, mientras los otros dos candidatos se vigilan uno a otro, sin parar…
LA cosa es clara: Lupillo le puede meter el susto más aterrador que se puedan imaginar tanto a Guillén como a Medina y para una caída tan estrepitosa como el hecho de que gane el regidor que copiaba la manera de vestir de Adrián Esper, nadie está preparado.
