EN la víspera del otrora llamado “Día de la raza”, ahora solamente conmemorado como llegada de europeos al continente, cabría revalidar algunas cosas que ocurren 528 años después en la Huasteca potosina y por qué muchos execran ahora de Cristóbal Colón tildándolo de genocida, abusivo y saqueador…
NO es por intrigar, pero los mismos consejos indígenas tienen sus reservas cuando se habla de discriminación y es que el Consejo Estatal Electoral (CEEPAC) fue señalado indirectamente de racista cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación echó abajo la Ley Electoral aprobada en este año y que serviría para el 2021, porque el Consejo, conformado por gente de origen mestizo y blancos decidió establecer lineamientos para las elecciones en los municipios con mayoría indígena sin basarse en ninguna opinión indígena, claro está y lo más grave, sin llamar a consulta de pueblos originarios como lo mandata la Constitución…
SI en el siglo XXI se puede llegar a este exceso de paternalismo colonialista en el que se decide por los indígenas, a pesar de que tienen una ley especial para ellos contenida en la Carta Magna, se puede inferir que la discriminación no solamente continúa igual, sino bajo el manto abyecto de la hipocresía, y si no, que le pregunten a los cientos de miles de indígenas que viven en la Huasteca centro y sur de la entidad…
ÁNGEL Iván Ortega Herrera, hijo de la exalcaldesa ya fenecida, Socorro Herrera (2009-2012) podría ser quien se quede en el lugar de Adrián Esper ahora que éste se encuentra como en la canción con que “está que se va y se va y se va y no se ha ido” a su proyecto de Gobernador que se comienza a agriar de tan rápido que lo arrancó…
ORTEGA Herrera ha tenido una modesta, por no decir mediocre participación en el Cabildo, pero su buen trato y el hecho de no estar peleado con nadie parece que le está ganando el puesto, uf, pero hay un par de regidores que pensarán en colgarse en un árbol de papaya si no los dejan a ellos y ahí podría haber problemas, pero peor ya no se puede estar, así que pues bueno, que pase lo que tenga que pasar.
