SI el alcalde Adrián Esper quiere ser congruente una vez en su vida, tendrá que separarse del cargo para este mes, y esa congruencia de la que se habla es la que está pidiendo el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, tomando en cuenta que el presidente de Valles quiere ser el nominado de MORENA para la máxima magistratura de la entidad…
PERO no, dice que se irá hasta diciembre de la alcaldía no porque vaya a hacerlo, sino porque está ejecutando el mismo juego cruel que suele usar con sus subordinados y con la gente de Cabildo, tenerlos en ascuas para saber por quién de ellos se decantará para que lo suceda durante casi un año, mientras él se concentra en la precampaña y, si todo sale bien, en la campaña…
LAS cosas están así: Coco Calderón Juárez, regidora de mayoría, sería la que seguiría en la sucesión, pero no se siente segura con los medios de comunicación y, lo peor de todo, es la que menos cabildea en el Gobierno…
LUEGO está cualquiera de los síndicos, pero Alejandro González Duque se salió de esa posibilidad, dado que no tiene buena relación con dos que tres regidores (no queríamos decir, pero volteamos a ver a Conde) y con el Secretario del Ayuntamiento, además de que no dedica el tiempo completo a esa labor…
ALEJANDRA Altamirano, la otra síndico sí la quiere, aunque tiene una bronca importante: no sabe gestionar ni negociar y es extremadamente intrigante con personas claves que están en el equipo del alcalde, cosa que complicaría las cosas…
POR último, el siguiente bloque partidista por bancada es el del PAN, y en ese lugar se encuentra Ángel Iván Ortega, quien no solamente es amigo de Adrián Esper, sino que suele ser maleable y poco conflictivo, así que las cosas se pueden facilitar en determinado momento si Adrián tiene que regresar…
PARA los ciudadanos da igual, porque el aspirante a gobernador rara vez ha hecho por gobernar en Valles.
