DIJO Salvador Dalí, quizá el más exquisito y asombroso pintor del surrealismo, que nunca más volvería a México, porque no tenía la menor intención de estar en un país más surrealista que sus pinturas y vaya que tenía razón el artista español…
CÓMO estarán de mal las cosas entre la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DGSPM) y la ciudadanía que en el transcurso de una semana a la corporación que dirige Héctor Mar del Ángel ha tenido un occiso en sus celdas y ha metido a las celdas a un joven del que sus elementos abusaron hace un par de semanas, solamente porque declaró contra esa corporación (una represalia artera y ominosa)…
AQUÍ viene los surreal: los papás del muchacho que fue detenido por los municipales y puesto que cuando a un ciudadano se lo llevan los policías, literalmente desaparece de la vista de sus familiares, los padres del joven en problemas tuvieron que marcar al 911 para avisar que su hijo había sido detenido por policías de la corporación del municipio y para ellos es lo mismo estar en calidad desaparecido, porque, como dijo la madre del que fue detenido arbitrariamente: en las celdas de ese lugar pasan “cosas raras”, refiriéndose a la muerte del taquero, Juan José Saavedra Meléndez…
EL alcalde Adrián Esper ha defendido a ultranza a Héctor Mar diciendo que es un cazador de secuestradores y justifica su actuar “rudo” con una serie de “buenos resultados”, ya que las calles están tranquilas y él mismo puede andar en bicicleta, de día y de noche…
PERO el problema es que no es un ciudadano el quejoso y, al margen del fanatismo adverso que le tiene un grupo de priistas que está buscando demandarlo hasta por haber nacido, muchos ciudadanos que no tienen ningún antecedente y que han sido abusados se han quejado y han denunciado…
La política cobra estas cosas y las cobra caras.
