Jueves 09 de Mayo de 2024

Bitácora

Y mientras siguen apareciendo casos de Coronavirus en el reducido grupo de personas que pueden viajar al extranjero y en ningún otro lugar (la lógica de muchos indica que a la mejor se les están haciendo pruebas a unos cuantos, pero que la fase dos está por comenzar porque han dejado casos sospechosos sin seguimiento), las noticias de la Secretaría de Salud parece que causan una duda bastante pertinente en los potosinos de todas las esferas sociales.

Y es que se ha dicho que los sospechosos no han sido más que poco más de cien, pero nada más resultan positivos los de un reducidísimo grupo social que es hombre/mujer de entre 25 y 44 años de edad que hace poco fue a Europa (España) y que regresó infectado. Pero el asunto es que inició la campaña de distanciamiento y la fase dos, que es la de contagios comunitarios, o sea cuando hay infecciones de persona a persona, cuando ya no hay un orden sobre el número de los enfermos.

LO que es cierto es que en el IMSS de Ciudad Valles, ya comenzó la fase dos, porque las medidas de prevención se comenzaron a aplicar, como por ejemplo: de 20 enfermeras por turno, ya no irán las 20 a trabajar, sino que habrá un grupo reducido de cinco que estará previamente capacitado y que se encargará de atender a los que lleguen y que sea comprobado que tenga el Covid-19, así que, estas acciones que ya arrancaron en el hospital más completo de Ciudad Valles y quizá se adelante el problema de los contagios en la Huasteca potosina.

ADEMÁS de ello, está el asunto de la migración turística que estuvo hace prácticamente horas en la región y también la migración importante de gente de la Huasteca sur que por ejemplo viene de la metrópoli regiomontana y que han estado allá desde hace años, para ganarse la vida que en los pueblos de San Luis Potosí  no se pueden dar.

AHORA bien, la vida de miles tiene que seguir, fuera del aislamiento que recomienda la Secretaría de Salud, porque miles y miles son pobres. Nada más en Ciudad Valles, hay 70 mil personas pobres, que no se pueden quedar en casa y que no tienen dónde dejar a sus hijos. Quizá se cuiden en la medida de lo posible, pero la realidad es que en Europa y Estados Unidos es más fácil pensar en la reclusión y el aislamiento (que no lo han hecho) porque hay riqueza empresarial y gubernamental dado el flujo económico que se tienen en estos lugares, ¿pero México?

MÉXICO y San Luis Potosí son lugares con depresión económica ancestral y los pobres, fuera de lo que pueda pensar un panista cualquiera, es parte de la economía activa, porque hace dinero en cantidades menores y en sucesión constante, pero ¿qué pasará con los que viven al día y no encuentran a nadie a quién venderle en la calle? El Gobierno federal dice que no se puede detener la vida, pero pues la recomendación es ésa y, tristemente nos damos cuenta que no estamos listos para la pandemia, en su fase dos, en su etapa más crítica, ni en salud, ni en economía.