Miercoles 15 de Mayo de 2024

Desaire a cuarentena endurecería medidas

Redacción

[Huasteca Hoy]

 

Tras anunciarse que el número de contagios confirmados de coronavirus en San Luis Potosí creció a 12 casos ayer, la titular de los Servicios Estatales de Salud, Mónica Rangel Martínez alertó que no toda la sociedad potosina está acatando el resguardo doméstico y sigue en las calles y advirtió el endurecimiento de las medidas en caso de que las autoridades sanitarias perciban que esta desobediencia pone en riesgo su capacidad para atender la emergencia en la fase de contagios locales.

Ya con la Jornada Nacional de la Sana Distancia en marcha, Rangel Martínez presidió ayer la primera conferencia de prensa no presencial, desde que empezó el ejercicio diario de información. Las preguntas de los reporteros fueron enviadas por mensajería o redes sociales.

Rangel Martínez inició su intervención con un llamado a que se respete la jornada de resguardo. “Hemos hecho recorrido diferentes espacios y hemos encontrado a familias que están paseando, personas adultas mayores, mujeres embarazadas. Eso no sólo pone en riesgo a sus personas, sino también a la sociedad”.

Reiteró el llamado es no salir a menos que se tenga que realizar una actividad esencial.

La dependencia informó que aumentó de nueve a doce el número de casos confirmados de  coronavirus en San Luis Potosí, agregándose a la lista dos hombres y una mujer jóvenes, todos con antecedentes de viaje al extranjero, en específico España, Inglaterra y Estados Unidos.

La funcionaria advirtió que el país está por entrar a la fase de contagios locales y que ahora es el momento justo para evitar un brote explosivo.

Mónica Rangel indicó que el jefe del Ejecutivo es la autoridad que podría ordenar, con base en el marco legal, el endurecimiento de medidas para garantizar el distanciamiento social, en caso de que no se sigan acatando.

“Sería una posición drástica”, reconoció la funcionaria estatal, “tomada con base en el panorama epidemiológico”.

Indicó que si bien no hay un número determinado de casos que disparen ese endurecimiento, los SES vigilan su capacidad de atención en el sistema de salud.

Cuando se observe que se llega a un 50 o 75 por ciento de esa capacidad instalada y se calcule que esa capacidad esté en riesgo de ser rebasada  “se van a tomar medidas”.