Verónica Galván
[Huasteca Hoy]
Ciudad Valles.- Después de que Gabriel Rocha trató de colgar una manta en el “puente negro” para su esposa Claudia Torres, ya nada volvió a ser igual, pues a partir del 14 de febrero han recibido varias invitaciones para desayunar, comer y cenar en varios restaurantes, para tomarse varias sesiones de fotos y para que Claudia se embellezca en distintos salones de belleza.
A Gabriel se le ocurrió colocar la “manta de amor” para que su esposa pudiera verla colgada, pero no fue así porque los policías de esta ciudad ya están espantados por tantas narcomantas que les han colgado en este y otros puentes de la ciudad, por eso no dudaron en acudir a retirarla.
Aunque a decir de Gabriel, lo dejaron ir porque probablemente escucharon mal cuando les dijo su edad, él les dijo que tenía 27 años, pero en realidad tiene 26, pero el presume que los elementos escucharon que tenía 17 y por su complexión delgada siempre le dicen que tiene menos edad, otra hubiera sido la historia si los elementos se lo hubieran llevado detenido.
Sin embargo, no fue así y hoy Claudia y Gabriel disfrutan de todas esas invitaciones que amablemente les han hecho varias personas al haberse hecho viral la noticia en varios medios, de que habían frustrado su intención al enamorado.
“Yo solo quería que mi esposa supiera cuando la amo, me escondí arriba del puente para colgar la manta, pero apenas la puse y ya estaban ahí los policías, me pidieron quitarla y no me quedó otro remedio”.
Gabriel dijo que lleva 11 años viviendo con Claudia, seis de casados por el civil y en enero apenas cumplieron dos años de casados por la iglesia, además de que tienen dos hijas, fruto de su amor de secundaria, porque fue en la técnica 16 donde se conocieron por el año 2009, luego se hicieron novios e iniciaron una vida juntos.
“La manta no decía nada malo, yo mismo la pinté y decía Claudia Torres, quiero que me hagas el amor de tu vida. Te amo”.
Aunque no la pudo ver colgada en el puente negro, ella se enteró por las redes sociales de que casi detienen a su esposo. “Seguimos disfrutando nuestro amor y de todo lo que la gente nos ofrece”.
