Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
Ciudad Valles.- El lunes 27 de diciembre un hombre delgado, de pelo largo, entrecano, de piel aperlada y vestido de mezclilla estuvo merodeando el jardín de niños Juan Escutia, de la colonia Hidalgo en el transcurso de la mañana.
El sujeto llamaba a los pequeños para que se acercaran a la cerca que lo separaba de ellos. Cuando llegó la hora de la salida de los menores el extraño se introdujo, confundiéndose entre los papás que en grupo ingresaron al plantel por sus niños.
Esto lo relató María del Carmen Martínez Vázquez, directora del kínder, quien pide a la autoridad municipal, a la policía o a quien corresponda que les manden vigilancia a la entrada y salida de los menores de edad porque en esa institución laboran puras mujeres y tienen miedo de una intromisión de ese hombre que parece querer tener contacto con los niños menores de cinco años.
Dos vendedores de gorditas que expenden casi a la esquina de la calle General Anaya, donde está el kínder, observaron la actitud sospechosa del misterioso individuo y cómo insistía en que los niños se acercaran a él. Cuando se dieron cuenta que el hombre se coló junto con la marabunta de papás, corrieron a ver qué pasaba.
La maestra Martínez Vázquez le pedía al hombre que saliera de la escuela, pero el hombre, aparte de impávido, mostraba indiferencia hacia los que le impelían a que saliera del kínder Juan Escutia.
El extraño dijo que sólo se saldría si un docente se lo pedía. Uno de los vendedores de gorditas, que tiene a sus hijos en el plantel le dijo que él era maestro y le exigía que saliera. La escena era observada por los padres de familias y niños. La directora llamó al 911 y llegó la patrulla 2492 de la Policía Estatal.
Los oficiales interpelaron al hombre y lo reconocieron como una persona que “sufre de sus facultades mentales”, revisaron sus pertenencias y le pidieron que se fuera.
La directora se alarmó porque no fue detenido a pesar de la actitud tozuda y riesgosa que había mostrado y ante la libertad que le concedieron los oficiales, quienes describieron y firmaron en la bitácora de incidencias de la escuela lo realizado en su atención del llamado.
La maestra pide apoyo de la autoridad municipal para que les ayuden con vigilancia, ya que la colonia Hidalgo es de las que han presentado problemas de inseguridad “y ¿para qué esperar a que se entregue un oficio? Esperamos que nos ayuden pronto, porque tememos por los niños”.
