EN una canción que es una pequeña joya del rock-pop en español, Gustavo Cerati apunta con su voz de barítono que “pasa el tiempo y ahora creo: el vacío es un lugar normal”, mientras reflexiona y se queja de una mujer que lo controla y lo castra psicológicamente, manejándole la cabeza como un revólver, título que lleva la canción contenida en un disco llamado Sueño Estéreo, de 1995…
PARA mucha gente de Gobierno del Estado, incluyendo al mandatario de San Luis Potosí el vacío, ese abismo negro de delincuencia cruda y atroz, parece que se convirtió en el ambiente de adaptación de las autoridades que son las únicas que ven normal el que a un jerarca joven del PRI lo rapten y lo hallen hecho pedazos, en tres bolsas de plástico, en un terreno de la colonia Las Mercedes, de la capital del Estado…
AL margen de que, si fue político, personal o lo que sea, el hecho de que a una persona le puedan hacer una cosa tan horrible es prueba fehaciente de que se tiene descuidada la vida de la ciudad más grande de la entidad, porque hay espacios, reductos, rincones, recovecos, guaridas, casas de seguridad, edificios, bodegas, salones, construcciones que se están usando con toda confianza porque hay delincuentes sueltos, libres e impunes por donde quiera que se le vea…
ESTO se debe a que la Fiscalía General del Estado, a cargo de Federico Garza Herrera hace como que hace, pero no hace nada y los niveles de violencia e inseguridad lo demuestran. Es verdad que un fiscal y sus policías investigadores no pueden estar vigilando a los criminales y sus andanzas por toda la ciudad, sin embargo, una fiscalía atenta y profesional no permitiría que muchos felones anduvieran libres en las calles, robando, violando, golpeando, matando, como lo hacen. Cuando el criminal ve que una autoridad es blanda e incluso guanga en su proceder, obviamente toma confianza y se avispa para darle más duro a la actividad…
APARECEN ejecutados y no se sabe nunca, nada, de quiénes los mataron. Roban con violencia camiones de valores o de empresas y atrapan (accidentalmente), a los ladrones, años después, cuando ya ni siquiera se está resarciendo el daño…
EN la Huasteca, en la Zona Media, en la Centro y el Altiplano pasa lo mismo: no se puede vivir con tranquilidad, porque pareciera que está uno expuesto a atrocidades parecidas a la que le ocurrió a Gancedo, ya que vivimos en una entidad en la que es inseguro y temeroso el ciudadano y es seguro de sí mismo y desafiante el delincuente, debido a la falta de seguridad pública, de parte de Jaime Ernesto Pineda que es un especialista en negar la realidad y un fiscal que se enoja cuando se le cuestiona sobre casos que debería haber resuelto desde hacía años…
EN la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en la propia del estado de San Luis Potosí se advierte que el Estado debe garantizar la seguridad de los ciudadanos, ahí tienen esa deuda.
