CONSUELO Carmona, diputada de MORENA de la presente Legislatura estatal dijo que Edson de Jesús Quintanar no tiene palabra y que es un politiquero como cualquier otro que engaña y comete todo tipo de embustes para poder mantenerse en el poder, como sucedió, ahora que el diputado por Valles madrugó a la diputada, juntando firmas para reelegirse como presidente de la bancada de los morenistas en el Congreso, cuando ya había acordado con Consuelo que se quedaría a suplirlo…
DESCONSOLADA, Consuelo calificó de la peor manera posible al joven político que todavía ni siquiera tiene 25 años de edad, pero que ya actúa como el más mañoso carcamán de la política, todo por la corrupción de menores (de mente), ejecutada por Cándido Ochoa, nuevo amigo de Edson y por otras influencias que hicieron al legislador un diputado potosino de peso completo: cínico, ambicioso y desleal…
AHORA la pregunta de los 64 millones de pesos es: ¿Edson de Jesús siempre fue así y en la campaña nomás se puso encima la piel de cordero o se convirtió en ese monumento a la codicia y a la marrullería estando en su curul? Oremos…
JAVIER Cruz Salazar deseó tanto no ser militante panista, que se le concedió, pero justo después de que fue electo para dirigir a ese partido y eso le puede hacer caer de lo ganado el 24 de agosto pasado, cuando, contra todo pronóstico, se quedó con la presidencia del Comité Directivo Municipal del PAN…
Y es que resulta que, aunque está impugnado por Luis Ángel Contreras Malibrán, su contrincante perdedor, Cruz Salazar fue borrado del registro que el PAN tiene a nivel nacional, o sea que ocurrió una aberración electoral en el panismo de Valles, porque se eligió a un no panista para que los dirija, ¡maldita sea!, habrán gritado todos los que lo estaban apoyando y que son grupos que han usufructuado el poder en el PAN desde hace años…
AL final del año antepasado, habría puesto una renuncia al partido el joven Cruz Salazar, porque sabría que, en la temporada electoral de 2018, apoyaría a Jorge Terán Juárez, nada más que ese papel de dimisión se traspapeló un tiempo y no se sabía si se le había aceptado en el PAN nacional tal disposición o no, aunque ahora se ha caído en la cuenta de que no está en el padrón nacional y eso es como (que nos perdone Dios) no existir…
ENTONCES ¿por quién votaron los panistas ese sábado 24 de agosto en el Club de Leones? ¿A favor de una entelequia? ¿Apoyando a una quimera? ¿Dándole carta de ciudadanía a un caballero inexistente, al estilo de Ítalo Calvino? Votaron por una persona que se dejó manipular por un grupo conformado por las hermanas Hurtado Barrera y por la familia Ortega Herrera, que, a su vez, tiene nexos de un concubinato político de hace 10 años con Jorge Terán…
TIC, tac, le cuentan los minutos al impugnado Javier Cruz como presidente “electo” de un partido que no lo tiene en su lista. Cuánto drama, cuánto dolor.
