EL alcalde Adrián Esper quiere que las 100 cámaras que pondrá en la ciudad y que costarán casi siete millones de pesos estén conectadas con la Guardia Nacional y con el Ejército, para tener más coordinación y protección a la ciudadanía y dijo que su política es de “balazos, no abrazos”, o sea que él asegura que tendrá mano dura contra los delincuentes…
POR lo pronto, el grupo de reacción formado por policías municipales y estatales ha detenido gente, pero la Fiscalía General los suelta, así que primero habría que coordinarse con las autoridades ministeriales, cuando se trate de casos de flagrancia y de evidente comisión de delito…
AUNQUE suena esperanzador que se diga que habrá protección, cómo le va a hacer si el Gobierno federal al parecer tiene la instrucción con sus fuerzas castrenses de no intervenir en cuestiones de inseguridad y de defenderse solamente cuando sea necesario…
ES verdad que se podrá ver, con luz y cámaras quién comete el delito, pero si la Fiscalía no está en plan de iniciar procesos pronto, “será la misma gata, nada más que revolcada”…
SI se toma en cuenta de que la zafra comenzaría hasta enero del año que entra, dado que se entregará sólo la mitad de lo que usualmente se estaba entregando (las últimas moliendas andaban en la entrega de 1 millón 200 mil toneladas de gramínea), es decir, unas 600 mil toneladas de la planta del azúcar, no es aventurado pensar que los cañeros recibirán, a su vez, la mitad de las ganancias que estaban usufructuando por año, cosa que abatirá la economía local en muchos sentidos…
EN una buena temporada de molienda, los cañeros reciben 1 mil millones de pesos, entre todos y esa cantidad de dinero la ponen a circular, generando con eso la mitad de la economía de Valles en casi todo un año…
PARA entender mejor: en Valles circulan 2 mil millones de pesos anuales de economía (quizá valga tener el adicional millonario del turismo, pero todavía no es muy alto ese ingreso), de esa cantidad, mil millones los aportan los cañeros y las demás actividades los otros mil. Bueno, para la zafra que viene, solamente se podrían producir alrededor de 500 millones de pesos, y eso dejará con 1 mil 500 millones a Valles para el año que viene, con el agravante de que la demás economía produzca se debe a que precisamente los cañeros ponen a circular su millar de millones…
LO que se teme es que la economía cause un marasmo económico hasta bien entrado el 2020, con las consecuencias desastrosas que eso trae, como cierre de negocios, empresas, desempleo y falta de liquidez general. ¿Cómo se defiende el vallense ante la falta de liquidez que provoca la sequía y la falta de inversión pública del Gobierno federal? Simple: aumenta la economía emergente o comercio informal, que hace sobrevivir a una buena parte de la población, pero que no tributa al Estado, causando con eso, atraso. Que el Señor nos ampare.
