VIENE la temporada de informes y muchas personas no están conformes con el simple hecho de escuchar “informe de gobierno”, porque salta al pensamiento la pregunta “¿qué van a informar?”, cosa que exacerba más el descontento porque los mismos ciudadanos se contestan a sí mismos con un desconsolador “nada”…
AUNQUE ha sido evidente que se han estado iluminando algunos sectores de la ciudad, han quedado muchos temas pendientes, como la pavimentación de las calles o de los accesos más importantes, así como la nómina exageradamente alta que apenas están abocándose a resolver, mediante el cese de personas que probablemente no sean necesarias en la administración, pero manteniendo a muchos buenos para nada que entraron en el actual Gobierno…
A esto se agrega ahora la cuestión de la inseguridad, que, de acuerdo con el secretario de Seguridad Pública del Estado, Jaime Ernesto Pineda, es una responsabilidad directa del Gobierno municipal, aunque la fuerza estatal está para apoyar y el pasado miércoles 4 de septiembre se conjuntó con fuerzas municipales para formar el grupo de reacción que se dedicará a los delitos de alto impacto, a los que nadie se dedica. La exigencia ciudadana es que se pueda comerciar u operar en la ciudad, sin la bota negra de los criminales en el cuello extorsionando, pero no ha sucedido así y el miedo volvió 10 años después de cuando ocurrió la crisis de inseguridad de 2009, 2010…
POR cierto, en el anuncio del “recién creado” Grupo de Reacción, se dijo que todos los policías están capacitados y han pasado por las pruebas de control y confianza, sin embargo, algunos de ellos, apenas entraron en funciones en Ciudad Valles, y no se sabe si realmente les han hecho exámenes, varios de ellos provienen de otros municipios…
EL comisario Pineda Arteaga en su reciente visita no supo ni decir cuántas patrullas tenía disponibles la Policía Estatal en Ciudad Valles, pero ya lo habíamos mencionado en este espacio, las unidades apenas se pueden contar con los dedos de las manos, y ayer una de ellas que fue utilizada para atender un reporte de “balacera”, se descompuso y fue necesario que la recogiera una grúa, a ver si alguien le pasa el dato al Secretario de Seguridad Pública…
PROBABLEMENTE se puedan informar algunos asuntos legales que se han logrado en la presente administración, pero los cambios sustantivos no se han dado y volvemos a la nómina: si con una lista de pago de 11 millones de pesos mensuales, Jorge Terán argumentaba que no podía hacer mucha obra, con la nómina de 15 millones que actualmente se tiene, menos se hará nada…
LA paradoja es que para bajar la nómina y tratar de ahorrar dinero que sirva para obras, el Ayuntamiento se mete en un problema peor, porque sobrevendrán las demandas laborales por despido injustificado y eso sale más caro, así como resulta más caro a veces “el caldo que las albóndigas”. Entonces este laberinto parece que no se puede resolver…
SE resolvería el problema de la falta de liquidez del Ayuntamiento si se gestionaran recursos a nivel estatal y federal con la mezcla de recursos, pero los gestores del Ayuntamiento se han limitado a aparecer en eventos y en no hacer esta tarea necesaria para poder contar con obras de impacto…
LOS ciudadanos no están tan contentos como antes y “la luna de miel” acabó hace meses, por eso el camino se ve medio pedregoso para los dos años que restan.
