Leonel Mora
[Huasteca Hoy]
La diputada Beatriz Eugenia Benavente Rodríguez lamentó que en torno a la Unidad de Evaluación y Control (UEC) del Congreso, la Junta de Coordinación Política (Jucopo) esté construyendo “un monstruo” dentro del cual se pretende acomodar a recomendados cuyo sueldo costará millones de pesos al bolsillo de los ciudadanos.
Denunció que, en torno a este órgano de vigilancia, se busca concretar “una simulación absoluta” para que algunos legisladores puedan seguir saldando compromisos políticos.
Mencionó que, de un presupuesto inicial de tres millones 700 mil pesos al año para el funcionamiento de la UEC, ahora se pretende un aumento a siete millones 700 mil pesos anuales.
“Lo que yo veo es que se busca tener un elefante blanco que le saldrá carísimo a la ciudadanía, pues tan solo en renta de edificios se erogarían entre 30 mil y 40 mil pesos mensuales más impuestos, sin contar los gastos de mobiliario y demás. Todo esto, me parece una majadería de la Jucopo”, añadió.
Si bien la legisladora no pertenece a la Junta de Coordinación Política, manifestó estar en su derecho de cuestionar las decisiones de este órgano interno y adelantó que ya dialoga con al menos dos integrantes de la Comisión de Vigilancia del Congreso, de la cual depende la Unidad de Evaluación y Control, para abordar el tema y devolver la legalidad al proceso de construcción de ésta.
Citó que el actual titular de la UEC, Jorge Ovidio Robledo Gómez, gana 90 mil pesos al mes, en tanto que los cinco coordinadores por debajo de él percibirían 25 mil mensuales. Se pretende que cada coordinador, a su vez, tenga tres personas más bajo sus órdenes.
“Intentan crear una Unidad similar en número de empleados a la que opera dentro del Congreso de la Unión, cuando aquí, las funciones que tendría a cargo serían mucho menos complicadas”, mencionó la diputada.
Por último, señaló que entre los perfiles que algunos diputados pretenden ingresar a la UEC hay personas que laboran para la Contraloría General del Estado o para la Comisión Estatal del Agua, mientras otros son de carreras nada afines, como ingenieros agrónomos y otros.
“Sé que estamos pisando intereses de los diputados, pero ellos pisan los derechos de los ciudadanos”, concluyó Beatriz Benavente.
