SI no hubiera sido por la lluvia, entonces no se hubiera avanzado mucho en el tema del basurero, porque, aunque dicen las autoridades que hay encapsulamiento de las áreas ardientes (de incendios provocados, según), de todas maneras el avance en trabajos de sofocamiento de fuego es de apenas un 40 o 50 por ciento y mañana se cumple una semana de que comenzó a prenderse el lugar que no fue remediado de manera correcta o de ninguna manera, porque al alcalde Adrián Esper no le pareció interesante esa cuestión.
EL basurero clausurado sigue echando humo, sin parar, y el apagado parcial que provocó la lluvia de la madrugada de este lunes solamente hizo su trabajo de combatir el fuego superficialmente, pero ese terregal sobre la basura, sin respiraderos no dejará de prenderse nunca, porque la cosa es de ingeniería, no de las cinco mil horas hombre que contó el regidor Conde Pérez, ni de fuerza bruta, sino de ingeniería.
DICEN que a algunas personas a las que les empieza a ir mal, hay que avisarles que todavía falta lo peor y así fue lo que hizo un juzgado de Ciudad Valles, que, mediante un expediente viejo, que tiene el número 98/2003 dictó sentencia condenatoria contra José Matilde Hernández Méndez, por el delito de despojo que cometió el abogado cuando se apropió sin pedir siquiera permiso para pasar, de 19 hectáreas (190 mil metros cuadrados, nada mal para un abogado que no conoce el Nuevo Sistema Penal) a donde metió aviadores que son o, eran, amigos de él.
ASÍ es. El licenciado en derecho que asesora legalmente a los sindicalizados de la DAPAS y que preside tácitamente al PRI desde que Herminia Recéndiz se retiró voluntariamente debido a la enfermedad de su marido, cuando corría el año 2002, se adueñó ilegalmente de ese predio descomunal, sin pagar un peso por la tierra que pisaba y loteó la zona, para dejar aviadores de entre su capital político.
UN juez determinó que Matilde había despojado a los ahora clientes de Luis Ángel Contreras Malibrán (quien puede perder elecciones, pero no casos) de muchos terrenos y Matilde ahora tiene de dos sopas: apelar en contra de la decisión del juez, ante el Supremo Tribunal de Justicia del Estado, que tiene un plazo que se vence el miércoles 28 de agosto o dejar que se cumpla el plazo y arreglarse con los ofendidos mediante la reparación del daño, que consiste en devolver los casi 200 mil metros cuadrados a los afectados.
PERO a ver, cuando Matilde invadió esos lugares, pensó que contaría con la venia y con la protección eterna de los priistas (en el 2002 gobernaba Juan José Ortiz Azuara), pero el mundo ha dado muchas vueltas, dijo la canción y ahora está con esta sentencia a cuestas con la que tendrá que resolver si apela o saca a los que les regaló terrenos hace 17 años, aproximadamente, cosa que suena de lo más improbable del mundo. A ver qué pasa.
