Rubén Pacheco
[Huasteca Hoy]
Hasta mayo de 2019, se han atendido alrededor 2 mil 500 migrantes en condición irregular en la estación migratoria de San Luis Potosí, de los cuales prácticamente todos fueron repatriados a través de conducciones asistidas, reportó Yolanda Camacho Zapata, titular de la oficina de representación del Instituto Nacional de Migración (INM).
“Es decir, en San Luis Potosí todavía tenemos un flujo migrante que quiere fluir, o sea, no quieren de manera irregular quedarse en el país”, expresó la funcionaria federal.
Explicó que el concepto técnico apropiado es repatriación, porque las deportaciones se dan unidamente del Poder Ejecutivo del estado cuando un extranjero no está en condiciones deseables. “La repatriación es simplemente cuando no cumplieron con los trámites legales para entrar al país de maneras regular”.
Detalló que las personas pueden arribar al complejo de diversas maneras, es decir, de manera voluntaria para solicitar la conducción asistida a sus países de origen o mediante “rescates” de operativos migratorios, por ejemplo, en las vías del tren.
Enfatizó que en la actualidad hay un cambio notorio en el perfil de los extranjeros en condición irregular, pues con anterioridad solo se reportaba presencia de hombres y mujeres viajando solos, pero ahora la dinámica es ver a familias completas.
Indicó que los procedimientos se han llevado a cabo, en coordinación con las tres sedes consulares de Honduras, El Salvador y Guatemala, radicadas en la capital potosina, que son los países de donde más proviene el mayor flujo migrante irregular.
“Estamos atendiendo mensualmente entre 400 y 500 personas en la estación migratoria. La población que llega puede arribar de varias maneras, una de ellas es cuando acuden de manera voluntaria, es decir, son migrantes que recorrieron todo un camino, que posiblemente llegaron a la frontera norte, pero que ya vieron que su intención de pasar a la frontera de Estados Unidos, no es ni fácil ni segura”, describió.
