Domingo 19 de Mayo de 2024

Bitácora

Dentro de las iniciativas sin importancia de la alcaldía de Valles estuvo la del regidor Marco Antonio Conde, que, de pronto, tuvo la ocurrencia de que todos los asistentes a la Sala de Cabildos, estaban en riesgo al meterse ahí, debido a que supusieron que había daños estructurales en el techo exterior y en el interior del recinto, en donde por ley se deben reunir los ediles y el alcalde para decidir los destinos de los vallenses.

Resulta que un perito externo contratado por la Dirección de Obras Públicas, cinco días después de que estuvo clausurado, el único lugar que por ley se puede usar para las sesiones de Cabildo, dictaminó que el sitio sí tenía daños, sin embargo, no era como para pensar que se podía correr un riesgo de algún accidente lamentable.

Pero más que el dictamen del perito, que, por cierto olvidó decirle a Protección Civil que quitara los sellos ayer en la tarde, lo que urgía era que se liberara de cintas prohibitorias a las puertas de Cabildo, porque hoy hay una sesión donde se le reconocerá al elegido para representar a los vallenses de lengua tének y el Salón “Rafael Curiel Gallegos”, no podía ser abierta, porque los sellos de precaución ponían en alerta a los ciudadanos.

Pero otra cosa olvidó el regidor Conde Pérez, o no sabía y es que así como se clausuró el Salón de Cabildo por un ardid desconocido, así también se debía solicitar un permiso al Congreso del Estado para habilitar cualquier otro recinto como lugar oficial para llevar a cabo las sesiones de Cabildo, ya que éstas se tienen que efectuar en el área del Palacio de Gobierno, porque aunque los espacios del Gobierno no son sacros, sí tienen su importancia ceremonial y por tanto, no se puede cambiar así como así la sede de las sesiones.

Por eso, ayer ya andaban con el chincual de abrir la Sala de Cabildos y olvidar lo de los peligros, porque hay compromisos que cumplir y qué finiquitar.

El doctor Mario Olvera Cervantes, con plaza en el IMSS salió al mes de iniciada la administración de la Oficialía Mayor,  porque se terminaba su periodo de permiso en el instituto, pero ahora, no se sabe si con permiso o no, entra de nuevo al Gobierno, pero como asesor en cuestiones de medicina y de la política médica del Ayuntamiento. A ver qué tal con el doc. Una más que fue sustituida fue Claudia Jiménez Moreno, por el expresentador de televisión de programas en los que se hacía mofa de la condición “homosexual” y que explora temas de lo paranormal; Néstor Daniel Castillo, quien estuvo en el Comité Municipal Electoral en la pasada elección sustituirá a María Aurora Aguilera como director de Transparencia, aunque ella ya había presentado su renuncia, porque durante los meses que lleva la administración no se le había aumentado el sueldo de directora.

En el FORTASEG despachará Ricardo Rodrigo Villarreal López, quien sustituye a Hermann Woge Martín del Campo, quien usa términos muy extraños cuando es entrevistado, porque hace suponer que “altos mandos” de MORENA le apoyan para proyectarlo en una carrera política, apenas en ciernes y fue enviado a los Servicios de Salud del Ayuntamiento.

Estos enroques, que suelen darse mucho a principio de año también alcanzarán a Gabriela Compeán, que se encuentra actualmente en la dirección de Protocolo y, quizá en próximas fechas al Oficial Mayor, Antoine Amin Gerala, aunque faltaría saber si esta última cuestión se puede confirmar en los próximos días.