Verónica Galván
[Huasteca Hoy]
Como una ilegalidad que le saldrá cara a la Dirección de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento (DAPAS) consideró Alejandro Ballesteros Corona el hecho de decir que quedaba rescindido su contrato, dijo sólo renunciará de manera personal, pero sólo en caso de que el alcalde Adrián Esper Cárdenas resuelva el problema y acepte la mesa del diálogo.
“Si le hicieron la notificación para procesal, donde mediante un documento que la Junta me hizo llegar que Marco Antonio Guillén rescindía mi contrato, la Junta sólo sirve de conducto, pero ellos debieron hacerlo a través de la Junta Estatal, donde se sigue el procedimiento de huelga, sin embargo yo no acepto dicha notificación porque es ilegal”.
Dijo que además están diciendo que también van para fuera otros siete compañeros, pero esto no es justo, “ya les dije que me voy voluntariamente, pero que Adrián Esper resuelva el problema”.
“Al haber una huelga, la relación de trabajo está suspendida, la Ley Federal del Trabajo contempla una suspensión, incluso los salarios no se están percibiendo por parte de los trabajadores, y Toño Guillén no tiene relación con los empleados del sindicato que están en huelga, esto está establecido en la Junta de Conciliación”.
Dijo que por eso se dejan de percibir salarios, prestaciones y todo lo que implica el contrato colectivo, esta es una ilegalidad más que le va a costar dinero a la DAPAS, esa misma idea tenía Jaime Yáñez Peredo, en la administración de Rómulo Garza Martínez para deshacerse del sindicato, le costó alrededor de 10 millones de pesos ese conflicto.
Nuevamente señalamos que Guillén demuestra su incapacidad para manejar a la DAPAS y esto le cuesta dinero a los usuarios, han contratado abogados foráneos cuando la DAPAS tiene más de 10 abogados y el mismo tío de Marco Guillén es abogado del organismo del agua, a él lo metió su hijo Francisco Rivera Montiel, ex regidor y primo de Marco.
Además contrataron a Gary Pérez que le cuesta mucho al organismo y la situación de la DAPAS es crítica, hay cobros indebidos, drenajes colapsados, mal servicio, todo este desorden administrativo es generado por la incapacidad del director.
Las cosas se van a complicar más con el estiaje, diciembre es un mes que la DAPAS disminuye su trabajo, pero en los meses de calor se complica y los verdaderos trabajadores del sindicato están en huelga.
