Rubén Pacheco
[Huasteca Hoy]
San Luis Potosí. Debido a que sus padres no cubrieron las “cuotas voluntarias”, la dirección de la primaria “Rafael Nieto”, ubicada en el municipio de Ciudad Valles, negó a cinco alumnos, dos niñas y tres niños, el derecho de ingresar al plantel, así como tomar la clase de computación, reveló una investigación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
De acuerdo con la información recabada en el expediente 2VQU-232/2017 de la Recomendación No 14/2018 emitida a Joel Ramírez Díaz, titular de la Secretaría de Educación de Gobierno del Estado (SEGE), las acciones violatorias de derechos humanos fueron promovidas por tres integrantes de la Asociación de Padres de Familia.
La investigación del organismo autónomo local, una de las madres narró que el 21 de agosto, su hija se presentó a clase para iniciar el ciclo escolar 2017-2018, sin embargo, durante el transcurso del horario escolar, tres madres de la citada Asociación se presentaron en su domicilio para exigirle la cuota voluntaria.
Sin embargo, indicó que al no tener el monto requerido, las “madres” fueron hasta el aula para sacarla y expresar frente al grupo, que su mamá no había cubierto el pago. No conforme con ello, las mujeres le dijeron a la pequeña que no se llevara los libros de texto gratuitos pese a ya haberlos recibido.
A pesar de ello el asedio continuó, pues el 24 y 25 de agosto acompañó a su hija a la escuela, sin embargo, en la entrada se encontraban las “mamás”, quienes no permitieron el ingreso de la niña, diciéndole que primero tenía que pagarles la cuota voluntaria.
Derivado de dichas actitudes, la menor de edad refirió a su progenitora que sentía miedo de acudir porque no la dejaban entrar, situación por la cual perdió una semana de clases, sin que el director interviniera ante la arbitrariedad.
Según la indagatoria, además de la niña sus dos hermanos de diferentes grados escolares también fueron víctimas de las políticas de las “madres de familia”, a quienes no les permitían el uso de espacio de computación.
La CEDH relató que otra alumna, narró que los lunes y jueves de cada semana, a su grupo le imparten clases de computación en el aula de medios, pero que a ella y otros dos compañeros no han acudido, pues la maestra los deja en el salón.
En una ocasión, una de las “madres” e integrante de la Asociación, sin importar el daño psicológico que podía generar en un niño, accedió al aula de medios y le dijo a la maestra que uno de los alumnos “ya podía ingresar” al centro de cómputo porque su mamá ya había pagado.
Por lo anterior, la CEDH recomendó a Ramírez Díaz: inscribir a los cinco alumnos en Registro Estatal de Víctimas; que el Órgano de Control Interno investigue y resuelva la omisión del directivo de la escuela; y convocar a una reunión entre los directivos y la Asociación de Padres de Familia para hablar sobre el derecho a la educación, que no estará restringido al pago de cuotas voluntarias.
