Leticia Nieto
[Huasteca Hoy]
Dando muestra de que los proyectos de “escritorio” por parte de Sagarpa, solo han servido para tirar los recursos federales y beneficiar a proveedores, el ejido La Lima cuenta con al menos diez invernaderos que nunca pudieron operarse al haberse asentado en tierra Choy, y actualmente las familias los ocupan como tendederos o gallineros.
La subdirectora de Asuntos Indígenas, Valentina Martínez García, dio a conocer que estos invernaderos llevan alrededor de cinco años de haberse instalado, y nunca han funcionado, pues solo llegaron y los instalaron en varios domicilios particulares y ni siquiera capacitaron a la ciudadanía sobre cómo podían trabajarlos, además de que uno de los problemas a los que se enfrentaron fue la falta de agua y tierra adecuada para la producción de hortalizas.
“Se hizo una petición a la misma dependencia federal, para que se apoyara con tierra vega, pero realmente eran muchos los camiones de tierra los que se necesitaban, pues todos estaban ubicados en terrenos de choy, nunca se dio respuesta”.
La funcionaria municipal señaló que el proyecto fallido para que se produzca los alimentos para el autoempleo y venta al mercado de Valles, representó una inversión de varios millones de pesos, o al menos así se les dio a conocer en su momento.
“La gente se cansó de esperar que se les apoyara, por parte de Sagarpa, ahora utilizan esta estructura como tendederos, algunos como está el calor ahora, se quedan a dormir dentro de los invernaderos, pero no se utilizan para lo que eran”.
Martínez García, señaló que mientras que este mega proyecto invernadero se cae a pedazos, los jóvenes tienen que salir a trabajar a esta cabecera municipal o incluso fuera del Estado, pues en la cordillera tének no hay ninguna oportunidad de emplearse.
