Silvia Neri Corona
[Huasteca Hoy]
XILITLA. El corredor gastronómico que se encuentra en el camino al Jardín de Edward James se ha convertido también en una cantina abierta en vacaciones, sin restricción de horario para la venta de alcoholes.
Los letreros de “micheladas”, venta de cerveza en bote y otras bebidas que se preparan con alcohol, forman parte de la amplia oferta al turismo, quienes adquieren cada una de las bebidas a costos que se triplican a comparación de tomarla en algún restaurante.
En el sitio se tienen hasta seis puestos de bebidas embriagantes, los cuales tienen permisos otorgados por la Dirección de Comercio, muchos de ellos continúan con su venta aun después de la temporada vacacional, lo que genera problemas al resto de los comerciantes.
Debido a la cantidad de puestos que se han permitido, cada vez es más complicado para los automovilistas circular por la zona, ya que de acuerdo a lo mencionado por el personal de Tránsito Municipal, se encuentra prohibido el paso de autobuses y la salida es hacia el centro del pueblo.
Y es que lo que empezó como una simple venta de gorditas o enchiladas de manera informal, hoy en día los puestos son semifijos, ya llevan parrillas, mesas, tanques de gas y toldos, espacios en donde se prepara la comida que venden.
