Jueves 16 de Mayo de 2024

Bitácora

Y lo terminaron haciendo: se acabaron a la DAPAS…

EL Consejo Consultivo de la Dirección de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (DAPAS) ofreció una conferencia de prensa en la que fue enfático, porque cuando se refiere al organismo operador del vital líquido, solamente la palabra “colapso” sirve para la descripción. Así de simple…

EL contador Juan Carlos Gómez, presidente del Consejo Consultivo, acompañado de otros miembros de este órgano colegiado, como Silvia Olvera, del colegio de Arquitectos y Carlos Solares de la Asociación de Hoteleros de San Luis Potosí explicó que tendrían que recurrir a medidas legales para obligar a la dirección de la DAPAS a que informen fehacientemente qué es lo que está pasando en el interior de sus oficinas, porque están gastando el 67 por ciento de los 8 millones de pesos que ingresan al mes en nómina, cuando el egreso por este concepto debería ser de apenas el 30 por ciento…

PERO eso no es todo, los miembros del Consejo, con el ceño fruncido, advirtieron que citarán a una Junta de Gobierno a manera de ultimátum, para que se les informe sobre la nómina abultada que ellos conocen a medias y que piensan que es el principal problema que quebrantó a un organismo que había gozado de cabal salud hasta el trienio pasado, pero que ahora está boqueando…

NO sólo eso, sino que dijeron que el director de DAPAS en realidad no está ganando los 63 mil pesos que se dijo que estaba ganando hace unos meses, sino que la dieta del funcionario, de nombre Edgardo González Ordaz debe rondar por arriba de los 100 mil pesos, o sea, el director de DAPA gana más que el alcalde y tiene un sueldo como de diputado local…

OTRA cosa, que refirió Silvia Olvera es que, por ejemplo el caso de un “asesor” de Edgardo González, hermano de Elia Rodríguez Lucero fue no sólo injustificado, sino patético, porque el monto de su salario supera los 40 mil pesos, pero no tiene ninguna actividad real dentro de la DAPAS, porque cuando se le preguntó dónde estaba su área de trabajo, sus archivos laborales, su rendimiento en papelería, no pudo decir nada y se limitó a decir que era asesor del director y que sólo se dedicaba a hablarle al oído a éste. Vaya con los sueldos por ser un susurrador, ¿no?…

PERO el mayor temor que tienen los del Consejo Consultivo estriba en el hecho de que ahora que se acabe la actual administración, se les vaya a liquidar con los montos de los sueldos estratosféricos que ostentan secretarias, asistentes, aviadores o personas que ni siquiera acuden a trabajar, como el caso del director de Catastro Municipal, Eladio Manzanares Rubio, que cobra en la oficina actual, pero sigue yendo por sus emolumentos a la DAPA, porque está buscando jubilarse con el sueldo alto y con un buen cargo. A gusto…

POR eso es la urgencia de arreglar ese problema, porque la DAPAS ya está colapsada, inoperante y triste, pero todavía hace un par de administraciones aún podía pagar sueldos, ISR (ya no lo paga), operatividad y proyectos a futuro, que son los tres rubros que debería abarcar, pero en la administración de Eligio Quintanilla los sueldos se fueron para arriba, al grado de llevarse en tal concepto 2.5 millones de pesos, mientras que ahora, con los cálculos recientes, debe andar en los 5 millones de pesos, convirtiéndose en la nómina más alta de la Huasteca, tomando en cuenta que el personal es de 230 personas y la gran mayoría cobra sueldos que no superan ni los 10 mil al mes, trabajando ocho horas y con jornadas extenuantes…