Leticia Nieto
[Huasteca Hoy]
Casi una semana sin recibir abasto de agua llevan familias de las comunidades indígenas de Valles, lo que ha provocado infecciones en los niños y la desesperación de las amas de casa que no han podido ni lavar la ropa.
Las familias gastan el poco dinero que tienen en la compra de botellones de agua para la limpieza elemental, por lo que piden al Ayuntamiento que les cumpla con el servicio o al menos les envíen pipas de agua.
Santana Márquez Escobar, del ejido San Antonio Huichimal, señaló que desde el pasado jueves carecen del vital servicio y hasta el momento ninguna autoridad ha respondido a las solicitudes que han hecho para que les envíen pipas. “Aquí no tenemos ni pozos, no entran las pipas, los únicos que llegan son los que vienen a vender agua en botellón, y esa es la que estamos comprando, pero sólo para lavar los trastes y lo que ocupamos en la cocina, realmente ni nos estamos bañando o lavando ropa, la poca lluvia que ha caído no ha servido ni para llenar dos cubetas, estamos desesperados”.
La ama de casa señaló que el Comisariado Ejidal, Estanislao Hernández no se preocupa por gestionar las pipas, pues vive más en Valles que en el ejido, además de que las autoridades municipales sólo responden telefónicamente y les dicen que atenderán el caso, pero no les dan una respuesta real.
Ante este problema , la Dirección de Agua Potable y Alcantarillado, informó que el “Sistema Tanchachín”, que abastece a la cordillera tének, se vio afectado desde el fin de semana por una falla en el servicio de energía eléctrica, lo que ha provocado que los equipos de bombeo dejen de funcionar por periodos largos, lo que a su vez ha causado problemas de baja presión o la suspensión temporal del servicio en algunas comunidades. Afirmó el organismo que la DAPAS Rural se encuentra de guardia permanente en espera de que se resuelva la situación para reactivar el bombeo con normalidad.
