[El Universal]
GUADALAJARA, Jal.-La tarde de este jueves, después de poco más de dos años bajo tierra, la tuneladora “La Tapatía” terminó los 4 kilómetros del tramo subterráneo de la Línea 3 del tren ligero de Guadalajara.
Aunque la nueva línea –que en total tiene 22 kilómetros y va de Tesistána, en Zapopan, a la Nueva Central Camionera, en Tonala– debía entrar en funcionamiento en junio de este año, los retrasos han postergado la entrega de la obra hasta el próximo mes de octubre.
No obstante, concluyó una de las etapas de mayor dificultad técnica y cuya fecha de entrega era el 1 de marzo de 2017: construir un túnel a 35 metros de profundidad con una longitud de 4 kilómetros y pasar por el centro histórico de Guadalajara sin afectar fincas catalogadas por el INAH, como la catedral tapatía.
Para la construcción de este túnel se utilizó una tuneladora alemana de la marca Herrenknecht, con una cabeza de corte italiana construida ex profeso para el tipo de subsuelo de Guadalajara.
La máquina, cuyo ensamblaje tardó un mes, tiene un peso total de 2 mil 300 toneladas, mide 105 metros de largo y tiene un diámetro de 11.5 metros; es capaz de perforar la roca al mismo tiempo que coloca anillos y dovelas para, a su paso, dejar listo el túnel por el que pasarán los trenes.
A partir de este mismo jueves comenzará el proceso de desmontaje para el almacenamiento de ésta máquina de última generación.
