Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
La ciudadanía prefiere a los políticos que echan mentiras dulces que a los que hablan con la verdad porque no se quieren responsabilizar de sus propios actos, sino que quieren responsabilizar a los mismos políticos, opinó la psicóloga y tanatóloga, Ema Arévalo Moctezuma.
La profesional de la mente divide en dos las preferencias de los ciudadanos: los que no se quieren responsabilizar de sí mismos y a los que les gusta escuchar palabras prometedoras, aunque sepan que son falsas; y los que gustan del político directo que exige que todos sean parte del desarrollo.
“Casi siempre escogen al mentiroso, porque la mayoría de los ciudadanos no quiere responsabilizarse de la vida política y social y la mentira dulce siempre cae bien, mientras que el que exige que todos avancen juntos no es muy popular”.
Comentó además que todo tiene que ver con la responsabilidad y la pesadez de cumplirla, porque refirió que la gran mayoría quiere que el Gobierno sea un órgano rector que resuelva los problemas, ah, pero si falla, entonces se le echa toda la culpa.
“El mentiroso, con su discurso, te quita responsabilidades de encima”.
