Redacción
[Huasteca Hoy]
Los vigilantes de la tienda Arteli pasaron por encima de los derechos y de la dignidad de una mujer que se quejó de que la acusaron de haberse robado algunos artículos.
Una mujer joven se dirigió a este diario para denunciar el maltrato del que fue objeto de parte del personal de vigilancia de la tienda Arteli, que le exigió que abriera su bolsa delante de otros clientes, en el área de cajas, porque le reprochaban que había tomado un desodorante y que éste no venía en su lista de compra.
La clienta, de la que se tiene plena identificación en este diario, mencionó que poco antes había pagado con una tarjeta de débito su compra de la mañana del sábado y que nunca había recibido ese trato.
Dijo que no tenía problemas con la tienda, aunque sí con el área encargada de vigilancia, por comportarse de manera intransigente, cuando ella no se estaba llevando nada.
Cuando un reportero de este diario quiso entrevistar al vigilante que efectuó esa revisión artera, se molestó porque se le estaba grabando en audio y abandonó el interrogatorio que se le hacía a pesar de que la subgerente había permitido que se celebrara la entrevista.
