Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
Algunos discapacitados usan su falta de capacidad para algunas actividades como arma para dar pena a los ciudadanos y pedir apoyos, dijo la especialista en lengua de señas mexicana Ofelia Machado Rodríguez y quien es colaboradora del DIF.
Ofelia Machado es la única que puede sostener una comunicación fluida y entender el complejo mundo de las personas que no escucharon jamás, y ella ha encauzado a muchos que pedían dinero bajo el condicionamiento de que sólo son sordos y nada más.
Recordó a los que suben a los autobuses o en los cruceros de calles, que entregan un papel en el que no explican nada, sólo piden “ayuda”, aduciendo que necesitan del apoyo de los demás por ser sordos.
Dijo que a muchos los hizo entender que ellos mismos pueden hacerse sus propios patrones, con microempresas de producción de artículos o, en su defecto, emplearse en las empresas que sí contratan a los sordos, como la purificadora que está en bulevar y Tamaulipas o en la fábrica de uniformes que está en la avenida Ejército Mexicano.
Para poder ganarse el dinero que todos necesitamos para vivir, hay que ofrecer un servicio o un bien a cambio, les ha enseñado la especialista a los 89 sordos que atiende en el DIF.
