Daniel Vázquez
[Huasteca Hoy]
CIUDAD VALLES. Los vecinos de la colonia Las Fincas llamaron a las corporaciones policiales, debido a que percibían un olor nauseabundo que presumían era de un cadáver humano, sin embargo sólo eran los restos de un animal.
Faltaban unos minutos para las 20:00 horas cuando los elementos de la Policía Municipal llegaron a la calle Baldeares esquina con Río Guadiana del sector antes mencionado, como referencia a unos metros de la maquiladora Arnecom, al norte de la ciudad.
En cuanto bajaron de las patrullas confirmaron el hedor nauseabundo, y se entrevistaron con unos vecinos, quienes comentaron que tenían la sospecha que provenían del interior de la casa de un vecino, la cual tenía varios días cerrada, y se veía una luz encendida adentro, pero ya habían llamado varias veces y no salía el propietario.
Por eso pensaban que probablemente su vecino había fallecido, y debido a que el inmueble estaba cerrado, los policías no podían ingresar, por ello dieron aviso a la Subprocuraduría de Justicia zona Huasteca Norte.
Tiempo después arribaron elementos del Grupo de Homicidios de la Policía Ministerial del Estado, para verificar la situación y ver cómo procederían, sin embargo los policías municipales les dijeron que ya se habían acercado a la casa y al parecer de ahí no emanaba la pestilencia, sino de un predio baldío contiguo.
Los uniformados se adentraron a ese solar y a unos metros encontraron un costal lleno de moscas, lo abrieron y entonces se dieron cuenta que eran los restos de un perro, no era un cadáver humano, y respecto al domicilio del vecino, probablemente estaba solo pero porque su propietario estaba fuera de la ciudad.