Redacción
[Huasteca Hoy]
El naturalista y medioambientalista Alejandro Aguilar Fernández dijo que el felino de talla pequeña llamado onza, no es una especie amenazada por su piel, sino porque los seres humanos hemos invadido su hábitat con centros poblacionales, ranchos, ejidos e invasiones típicas que se hacen a entornos naturales en esta región.
En dos ocasiones relativamente recientes, se han reportado atropellamientos de onzas en carreteras de la región y por ese motivo se le preguntó al especialista en fauna de la Huasteca, por qué esta especie en particular era víctima de los coches.
Dio una buena noticia y una mala. La buena, es que la onza es el felino que más abunda en esta zona y en la Huasteca; la mala es que es una especie amenazada, porque su territorio natural se ve invadido por los seres humanos cada vez más y el trazo de una carretera o el cambio de uso de suelo, quedan en medio del territorio de estos animales carnívoros, que pueden tener un pelaje gris o rojizo.
Dijo que no significan ningún peligro para el ser humano, puesto que son de talla pequeña y que sus presas son conejos, ratas, aves y otros animales pequeños. Refirió que es lamentable el suceso en el que se encontró un ejemplar muerto sobre el libramiento Valles-Tamuín, a la altura de Adolfo López Mateos.
