Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
Ya pasó una semana y una niña de sexto grado de la escuela “Rafael Nieto”, del ejido San Felipe, no ha podido tomar clases porque la Sociedad de Padres de Familia decidió que no tuviera acceso a la educación hasta que su mamá pague los adeudos de inscripción de la pequeña y de un hermano de ésta.
“¿Usted qué hubiera hecho si le sacan a su hija de la escuela?”, preguntó Patricia Quezada Vargas, madre de una niña de 11 años de edad que el lunes pasado presuntamente fue sacada de su salón por la sociedad de padres de familia y obligada a entregar sus libros de texto gratuitos, hasta que su madre finiquite su adeudo con la asociación, puesto que debe 860 pesos, dos cuotas de 400 pesos y una cooperación “voluntaria” de 60.
Crónica de un acto anticonstitucional
El lunes 21 de agosto, temprano, Erika Ahumada Torres, miembro de la Sociedad de Padres de Familia, fue a decirle a la hija de Patricia Quezada que saliera del salón y que entregara sus libros de texto a la maestra. La madre de la niña había prometido el pago de los dos adeudos de cuota de inscripción al ir a dejar a la pequeña a clases, pero no volvió. Entonces sacaron a la niña
“Yo me aguanté y no dije nada, pero el martes ya no la llevé a la escuela y el miércoles fui a Derechos Humanos a denunciar”, mencionó Patricia Quezada. Ayer jueves, hizo que la niña se pusiera el uniforme y se enfilaron a la escuela y “no me la dejaron pasar otra vez”, afirmó la madre, visiblemente enojada.
El director de la escuela le dijo a la madre de familia que se arreglara con la sociedad de padres de familia porque él no la podía ayudar.
La niña
La pequeña que fue privada de estudiar durante toda esta semana dijo que la presidenta de la Sociedad de Padres de Familia le pidió que se saliera del salón y que antes entregara sus libros a la maestra de sexto año. Ella obedeció y no dijo nada. Así como se lee, lo narró.
