(EFE)
Ischia, Italia.- Doce de los 41 heridos que se registraron en el terremoto de magnitud 4 en la escala Richter que sacudió ayer la isla italiana de Ischia continúan ingresados, pero ninguno se encuentra grave.
El director sanitario del hospital de Ischia, Antonio D’Amore, explicó al canal de noticias “Skytg24” que 41 personas, entre ellas los tres niños que habían quedado sepultados al derrumbarse su casa, tuvieron que ser atendidas tras el seísmo que se produjo a las 20:57 horas locales (18.57 GMT) del lunes. De estas, sólo doce, incluidos los tres niños, de 7 meses, 7 y 11 años, siguen ingresadas debido a los pequeños traumatismos sufridos.
El más grave es un hombre de 44 años que fue trasladado al hospital Cardarelli de Nápoles por las heridas causadas por el derrumbe de su casa.
Muchos de los heridos son turistas que se encontraban de vacaciones en esta isla, que tiene un censo de 60.000 habitantes pero que en verano triplica sus habitantes.
D’Amore aseguró que tanto Mattia, de siete años, como su hermano Ciro, de 11 años, se encuentras en buenas condiciones a pesar de haber quedado sepultados durante más de 14 años bajo el colchón de la cama donde se habían refugiado.
El último que fue rescatado fue Ciro, al que se trasladó inmediatamente al hospital para ser sometido a exámenes médicos. A las 4 de la madrugada los bomberos habían salvado al otro hermano, Pasquale, de 7 meses, que también sigue bajo observación por precaución, pero ya desde el primer momento se comprobó que el bebé estaba en perfectas condiciones. En la entrada del hospital se encontraba esperando la madre de los niños, que está embarazada de cinco meses de su cuarto hijo.
Toda la familia, la pareja y sus tres hijos, había quedado atrapada al derrumbarse completamente tras el seísmo el edificio de dos pisos donde vivía en el municipio de Casamicciola, en el norte de la isla, y el único que ha sufrido daños.
