Silvia Neri Corona
[Huasteca Hoy]
XILITLA. Los bosques que convergen en este municipio se encuentran enclavados en la Sierra Madre Oriental, a más de mil metros sobre el nivel del mar y se encuentran dentro de la Reserva de la Biosfera, en ellos se tiene una diversidad de especies maderables y de fauna, que sobrevive de la deforestación de su ecosistema en otros lugares.
El director de Ecología Municipal, Marcelino Covarrubias Hernández, explicó que realizar una deforestación de tantas hectáreas en el tiempo que sea, altera el ecosistema que existe en este lugar, “nosotros por la amplia vegetación que presentamos, consecutivamente tenemos mucha humedad y lluvias en nuestro municipio, sería fatal realizar una tala inmoderada como la que pretenden”, indicó.
El bosque abarca toda la cordillera alta, desde la comunidad de La Silleta hasta la comunidad de Soledad de Zaragoza, para después unirse a lo que es la Sierra Gorda, “de ahí la importancia y la exigencia del grupo ecologista de que se revoque ese permiso otorgado por Semarnat, estamos hablando de un bosque enorme, en donde se tienen miles de especies de fauna y flora, los cuales siempre han sido respetados por los lugareños”, indicó.
En cuanto a la variedad de fauna, los bosques son parte importante para mantener los espacios que den una certeza de vida a los animales, “tenemos en noviembre la llegada de las guacamayas, una variedad de loros y quilas, también hemos presenciado en esporádicas ocasiones la presencia del paso de la mariposa monarca, tenemos nuestra mariposa 88 que es una variedad única, está el corredor del jaguar que por años ha habitado estos bosques y donde la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) tiene las fotografías”, aseveró.
Hay otras especies como el puma, el oso negro, venado, tecolotillo, zorra, tejones, armadillos, ardillas negras y las ardillas de cola roja (variedad única en este lugar), se han llegado a ver monos, “nuestros bosques protegen todas esa fauna, acabarlos, tirar árboles de tantas hectáreas nos quita la diversidad que tenemos, nos quita nuestra identidad, por ello muchas de la dependencias como la Conanp buscaron bajar proyectos para que los lugareños trabajaran sus bosques, los cuidaran y reciben un pago, para no hacer lo que ahora pretenden acabar con dos mil hectáreas de árboles”, agregó el funcionario.
En el ejido La Trinidad los lugareños utilizan este espacio para que los visitantes recorran el sitio, el senderismo es una de las actividades atractivas para quienes llegan al lugar, ver a las cinco de la mañana la niebla encima del lugar es un atractivo extra, La Silleta también es una comunidad que vive del turismo, en este lugar se puede llegar al famoso Cerro de la Silleta que es otro espacio ícono del Pueblo Mágico.
Los árboles maderables también forman parte de la variedad que se tiene en el lugar, como son los cedros blancos, cedros rojos y en algunos lugares podría localizarse algún árbol palo escrito que ya está en extinción, “esta variedad es muy perseguida para hacer muebles, ya que tienen un promedio muy alto de durabilidad y los pocos que quedan se han protegido”, indicó el funcionario. Esperan tener para la próxima semana ya los documentos que indiquen quiénes o quién solicitó el aprovechamiento maderable en la comunidad de Soledad de Zaragoza, “porque hasta el momento ni esos documentos nos han mostrado, y que Semarnat sabiendo de lo que significan estos bosques porque otorga permisos sin antes conocer los espacios, los permisos no se dan de escritorio, invitamos al titular de la dependencia federal a que venga, que conozca el ecosistema, que se enamore de él, y verá que no es como se pintaron en papel”, concluyó Covarrubias Hernández.
