Daniel Vázquez
[Huasteca Hoy]
CIUDAD VALLES. Tres de los cuatro policías estatales que estaban presos por el asesinato del joven Daniel Zamorano Rocha, quedaron en libertad luego de que un juez desechara las supuestas evidencias presentadas por la fiscalía.
Desde el jueves salieron de la cárcel los policías José Luis Juárez Rodríguez, Juan Diego Martínez Delgado, y Juan Francisco Sánchez Hernández, y sólo permanece internado Pedro César Torres, quien espera que el juez resuelva también a su favor.
Los cuatro policías participaron en un operativo que se llevó a cabo la noche del 8 de enero de 2013 en la colonia Tantocob, donde murió un joven de 15 años de edad, que respondía al nombre de Daniel Zamorano. Según las investigaciones que realizaron los elementos de la Policía Ministerial del Estado, así como señalamientos de familiares, testigos, y algunas evidencias, apuntaban a que los uniformados fueron los responsables de la muerte del menor.
En aquel entonces varios civiles que portaban armas de fuego atacaron un taller de hojalatería que se ubica en la calle principal de la colonia Tantocob, cerca de las instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad, el cual era propiedad del papá de Daniel, y éste se encontraba ahí al momento de la agresión.
Se informó que el ataque iba dirigido a un cliente, pero supuestamente los proyectiles de los delincuentes no alcanzaron a nadie, pues todos corrieron, y Daniel se escondió en un predio baldío, pero salió al ver que llegó una patrulla de la Policía Estatal, y repentinamente se escuchó un balazo, que habría sido disparado por uno de los policías, y el joven cayó muerto.
La familia Zamorano acudió ante varias instancias, incluso a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y al año siguiente del crimen, fueron detenidos tres policías estatales, tratándose de José Luis Juárez Rodríguez, Juan Diego Martínez Delgado, y Juan Francisco Sánchez Hernández.
A principios de 2015 un juez los sentenció, a José Luis y Juan Diego les dio 20 años y siete meses de prisión, mientras que a Juan Francisco le dictó 13 años de cárcel. Posteriormente fue detenido Pedro César, y en marzo de ese mismo año le dieron una sentencia de 16 años y seis meses de prisión. Los delitos eran homicidio calificado y abuso de autoridad.
Pero los defensores legales de los policías apelaron los veredictos, argumentando varias inconsistencias en el proceso, como por ejemplo que el proyectil que ocasionó la muerte de Daniel fue de un calibre diferente al de las armas de cargo de los policías.
Un juez de la primera sala del Supremo Tribunal de Justicia del Estado revisó a detalle el expediente, y corroboró las inconsistencias, por ello revocó la sentencia y dio libertad a los tres policías que fueron detenidos primero, quedando en análisis la situación de Pedro.